Sequía

Los grandes municipios abren pozos para paliar la peor sequía del siglo

Benalmádena halla una decena de perforaciones e inicia los trámites ante la Junta para su uso, mientras que Vélez busca cerca de Almayate nuevas aguas subterráneas 

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Imagen de archivo del embalse de la Viñuela durante una de las operaciones para permitir la regeneración de arroyos y pozos en cotas más bajas. | FRAN EXTREMERA

Imagen de archivo del embalse de la Viñuela durante una de las operaciones para permitir la regeneración de arroyos y pozos en cotas más bajas. | FRAN EXTREMERA / FRAN EXTREMERA. Málaga

Fran Extremera

Fran Extremera

Los grandes municipios de la provincia de Málaga no sólo han empezado a realizar cortes nocturnos en el suministro de agua potable o a aplicar medidas restrictivas en el uso del caudal. Para paliar la peor sequía del siglo también proliferan las acciones que persiguen mediante pozos o sondeos aflorar nuevas aguas subterráneas.

El Ayuntamiento de Benalmádena informaba ayer de que han localizado hasta una decena de pozos en su término municipal y, al objeto de poder utilizarlos, dispongan o no de agua potable, ha iniciado ya los trámites ante la Junta de Andalucía.

Asimismo, en Vélez-Málaga, fuentes municipales señalaban a este periódico que de momento «sin éxito» han comenzado a efectuarse pruebas «en distintas zonas próximas a Almayate», sin descartarse la opción de perforar cerca de Torre del Mar.

En el municipio benalmadense y a través del área de Medio Ambiente, el trabajo para hallar nuevos caudales subterráneos se realiza «a destajo», como argumenta el edil de dicha delegación municipal, Juan Olea. «Nos hemos echado a la calle para buscar pozos y hemos remitido recientemente un escrito a la Consejería de Industria, Energía y Minas, así como otro a Medio Ambiente, donde se informa del hallazgo de casi una decena de pozos con agua, presumiblemente, no apta para consumo humano».

Acompañado por el técnico del área, Olea manifestó que el equipo de gobierno «está buscando impulsar nuevas medidas para seguir reduciendo el consumo de agua». Y añadió que se ha iniciado un estudio para el uso de agua regenerada en todo el término municipal y la puesta en marcha de actuaciones para la elaboración de un «diagnóstico de la situación actual de esos pozos localizados en el municipio que podrían ser utilizados en un futuro para lograr un ahorro considerable de uso de agua potable para la prestación de servicios públicos».

En el documento remitido a la Junta, la delegación municipal de Medio Ambiente especifica que está en estudio la situación administrativa de dichos pozos de los que no tenía conocimiento previamente el Consistorio, así como que se estudia si los mismos cuentan con la preceptiva concesión para su puesta en servicio. El Ayuntamiento ha enviado el listado de los pozos localizados, al objeto de conocer también si el Gobierno andaluz «tiene constancia en algún registro de los mismos y para recibir asesoramiento sobre las gestiones a realizar para su posible puesta en servicio».

«Hemos descubierto estos pozos, que ya tienen en funcionamiento desde hace mucho tiempo otros municipios limítrofes. En distintas mesas y reuniones con técnicos, incluso con algunos funcionarios jubilados, incluidos los de Emabesa, hemos localizado una decena de pozos, con la firma de la providencia del inicio de expediente para un estudio que permita conocer en qué situación se encuentran o conocer con detalle sus niveles», indica el propio Olea.

Avance en Archidona

Más avanzada está la situación en Archidona. Después de que empezaran a realizarse sondeos en 2022, uno de ellos acaba de entrar en funcionamiento y aporta un caudal de 20 litros por segundo. El Ayuntamiento califica de «éxito absoluto», porque se trata de un complemento «crucial para asegurar el suministro de agua potable en el municipio».

Cabe recordar que la búsqueda de nuevas aguas subterráneas se planteó como «medida urgente para solventar la preocupante disminución de los niveles del antiguo pozo Moya, atribuido a las bajas precipitaciones de la serie histórica más reciente». El técnico encargado de este proyecto, Eduardo Delgado, ha incidido en que el agua se ha localizado a una profundidad de 120 metros.

La actuación recién concluida ha requerido, según apunta el alcalde, Manuel Almohalla, de una inversión de unos 200.000 euros, de los que la Diputación de Málaga ha aportado el 88% y el resto, el propio Consistorio.