El ‘onanismo mental’ de los políticos
La Junta de Andalucía, con su presidente digital a la cabeza, José Antonio Griñán, nuevamente ha conseguido su cuestionable cuota de protagonismo, a través de la Consejería de Sanidad, editando una guía para niños y jóvenes, en la que se ensalza y defiende la masturbación, fantasías eróticas, y la píldora anticonceptiva. El texto se reparte en los centros de enseñanza secundaria y bachillerato a alumnos entre 12 y 18 años que lo soliciten.
A los regidores de la Junta parece preocuparles sobremanera que niños y niñas, andaluces y andaluzas, reciban una formación erótico-sexual lo más amplia posible para poder alcanzar intensos y saludables orgasmos desde su más tierna infancia. Ya anteriormente, para paliar la ignorancia reinante sobre el gratificante tema, se editó un ‘mapa del clítoris’ y así evitar extravíos en la persecución de la excitación. Es obvio que el ‘celo juntero’ en torno al gozo sexual de sus niños de hoy y futuros jóvenes votantes del mañana, es digno de encomio.
La mencionada guía aconseja que ‘la primera vez’ sea a los 16 años, si bien aclara que la experiencia con penetración incluida, no está forzosamente relacionada con la edad; solo a efecto orientativo. De todas formas, las posibles dudas, quedarán perfectamente aclaradas cuando entre en vigor la Ley de Salud Sexual y Reproductiva, ya que pasará a ser una materia obligatoria en todos los niveles escolares.
Una vez más los políticos han demostrado poseer sensibilidad y vocación de servicio hacia sus administrados y administradas, liberando a padres y madres del violento trance que constituye el verse obligados a tener que documentar a sus hijos sobre tan delicados e íntimos temas.
Para la ‘Oposición’, como su propio nombre indica y son unos cuantos millones, están en total desacuerdo con este tipo de publicaciones propiciadas por el PSOE y alentadas por la ministra de ‘Igual-da’, Bibiana Aído, ya que suponen un desprecio hacia el derecho de los padres sobre la educación sexual de sus hijos.
Si el sr. Griñán y todos su consejeros, incluido el de Sanidad, dedicasen el mismo empeño en la reducción de esa lacra social que supone el millón largo de desempleados andaluces, miles y miles de familias, con todos sus miembros en el paro, se lo agradecerían infinitamente, pero al parecer, el deterioro socio-económico que nos invade es de tal magnitud, que nuestros dirigentes, con su ‘onanismo mental’ no dan para más. ¡Que vergüenza!
Jose-Tomás Cruz Varela
Málaga
