El colectivo de trabajadores por cuenta propia ha celebrado esta semana el anuncio de la Junta de Andalucía de que se creará una Dirección General de Autónomos para atender de forma específica sus necesidades. Lo cierto es que los autónomos han sido siempre los parientes pobres del mercado laboral español, que ha arrojado obligaciones propias del empresario consolidado a lo que en muchos casos no eran más que autoempleos de subsistencia. El Estatuto del Autónomo, aprobado en 2007, mejoraba aspectos como las prestaciones de las bajas y ha introducido la posibilidad de cobrar el paro, pero ha sido la crisis económica la que ha dejado a este colectivo en una situación dramática, enfrentados tanto a la brutal bajada del consumo como a la indiscriminada restricción del crédito bancario.

El vicepresidente de la Asociación de Trabajadores Autónomos de Andalucía, Rafael Amor, ha denunciado en varias ocasiones que muchos autónomos han tenido que cerrar su negocio, no por falta de volumen de trabajo sino, sencillamente, porque el banco no les renovaba la póliza de crédito necesaria para funcionar. Lo más llamativo es que no eran grandes líneas de financiación, sino pequeñas pólizas de entre 10.000 y 24.000 euros que los listos del sistema financiero, al parecer, consideraban inadmisibles. Igual son de la misma caterva de los que han dejado los 23.000 millones de agujero en Bankia. En fin. Por cierto, que en Málaga, los autónomos son no cuatro gatos sino más de 94.000 cotizantes a la Seguridad Social y, en muchos casos, creadores de miles de empleos asalariados. Así que señores del Gobierno, de la Junta y de los bancos, a cuidarlos.

Cámara y Turismo. Una buena noticia para Málaga es la reelección del presidente de nuestra Cámara de Comercio, Jerónimo Pérez Casero, para dirigir de nuevo la Comisión de Turismo de la Asociación de Cámaras de Comercio del Mediterráneo (Ascame), tras la junta directiva desarrollada estos días en Estambul (Turquía). Aunque entidades como la Ascame parezcan algo alejadas de la realidad cotidiana económica, lo cierto es que hay tortas entre muchas ciudades del arco mediterráneo para presidir sus comisiones, y el hecho de que Málaga repita al frente del área turística -la más relevante dentro de Ascame- dice mucho del potencial de la Costa del Sol.

Pérez Casero, que ya ha desempeñado esta función durante los últimos cinco años, trabajará para alcanzar una oferta de buena calidad y lograr la mayor competitividad posible del área mediterránea como destino turístico común a nivel mundial, sobre todo ante la difícil situación de crisis económica internacional que se atraviesa y, especialmente, cuando se observa que este sector es el que genera la mayor parte del empleo a escala mundial. La Ascame fue fundada en 1982 en Barcelona, y aglutina a más de 500 Cámaras de Comercio.