La tribu no es una cárcel. Pero los jefes de la tribu pueden acabar en la cárcel ante la estupefacción tribal de quienes demuestran una férrea disciplina al jefe como principal tarea de pertenencia. Algunos se sometieron a la tribu elegida para construir el futuro de la sociedad desde ese colectivo, la unión hace la fuerza. Otros ni siquiera por eso, lo hicieron sólo por pertenecer a algo, por no estar solos sin protección alguna -aunque eso suene a secuencia de El Padrino-, o por buscar un trabajo para ellos o sus hijos al abrigo de las siglas.

Lo paradójico es que todos, casi sin excepción, terminan por defender la tribu incluso contra la sociedad toda cuya mejora daba sentido a la pertenencia política. Porque hablamos de política y de partidos y de partidarios y de partidistas…

Cante por Barceneras

Cómo es posible que una buena mujer me exija en las redes, por este comentario mío: «La cárcel, ese gran escenario donde los Bárcenas de toda la vida aprenden a cantar y, a veces, CANTAN», que escriba otro con algún corrupto del PSOE para ser solvente. ¿Cuánta objetividad nos devora el sentido de pertenencia? Al margen de que Bárcenas haya sido durante años el tesorero del PP, acaso no es uno de los personajes objetivamente menos ejemplares para cualquier ciudadano que no tenga, al menos, 48 millones de euros en cuentas opacas de bancos suizos. ¿Nos parece a algunos eso más honorable por el hecho de pertenecer a su mismo partido, el partido que fuera aunque sea en concreto del PP? Y habiendo sido un tipo como Bárcenas, ni más ni menos, que el tesorero del PP, ¿no es lógico también que más se avergüencen de él y menos le defiendan quienes por su simpatía o militancia popular deben sentirse engañados, afrentados, traicionados, despreciados, ridiculizados, utilizados y estigmatizados en su militancia por el personaje, por el daño que ha hecho a la credibilidad de la imagen del partido?...

Peligro resaca

Hasta cuándo se puede guardar la basura debajo de la alfombra. Qué fuerza siniestra alcanza esa resaca partidista que hace que se guarde uno dentro la escoria, en vez de arrojarla a la orilla como naturalmente hace el oleaje. Precisamente pensaba en esto mirando la imagen que me ha enviado el Aula del Mar de Málaga, donde se alerta a los bañistas este verano que recuerden que no es seguro bañarse en la playa cuando se visualice ese extraño fenómeno. Toda la orilla recibiendo la espuma de las olas menos un tramo, ése en el que el reflujo devuelve el agua mar adentro sin dejar que rompa contra la arena, la zona de resaca. Cuidado con dejar que los niños o los mayores se bañen cerca. No pocas veces la resaca se cobra víctimas por ahogamiento…

Huerto político

Resulta fácil ver también en el «perestroiko» gesto de Griñán una acción partidista. Aunque tras haber declarado esta semana que no se presentará a la reelección como presidente de la Junta de Andalucía, la decisión haya ido acompañada de primarias en el PSOE andaluz a finales de julio. Griñán ha sembrado de minas regeneradoras el huerto orgánico del PSOE. Parece que quiere arrancar todo el sembrado para que algo nuevo crezca con más fuerza que la que ahora tienen las hortalizas, poco crecidas según los sondeos del CIS. Si Rubalcaba fuese una berenjena, por ejemplo, no pasaría del palmo. Aunque también sea verdad que si el ministro Wert fuera un pepino, en ese metafórico huerto político, hoy no llegaría a ser cosechado más que como pepinillo para vinagre.

Por pero sin

Pero el huerto popular aguanta mejor la sequía del desapego ciudadano, según los sondeos, que el patatal socialista. Y eso a pesar del Bigotes y de Correa y de Matas y de Blesa y de Bárcenas y demás «boniatos» populares o ad láteres. En el caso del Gorbachov andaluz, Griñánchov, parece claro que con el mínimo margen que ha dejado para que alguien distinto a Susana Díaz, su candidata, se presente a las primarias, el resto del partido le trae sin cuidado, ya que sólo queda un mes para el 29 de julio. Todo por el partido pero sin el partido. Claro que el partido en Andalucía siguen siendo los tomates pochos, sin caducidad en el bote, de Chaves, Zarrías, Caballos, Pizarro… Y en el resto del país, sin que gente como Madina haya demostrado no ser más que el eterno muchacho obediente aunque sobradamente preparado, Carme Chacón sería la cara de un PSOE renovado, a pesar de haber sido ministra y ya derrotada una vez en el último congreso socialista. Por qué nadie se ha preocupado en el PSOE de que exista una cosecha bregada en la vida, con vocación de servicio, sana ambición demostrada para asumir responsabilidades y que sea conocida ya por el ciudadano que algún día tendrá que votarla. Pues eso….

¡Hasta agosto!

Cuiden de los suyos este mes de julio, cuídense bien para poder cuidarlos, e intenten ser libres para que los demás vean que para sobrevivir no hace falta ser un esclavo. Y sueñen. Gracias. Hasta agosto... Porque hoy es Sábado.