La Supercopa vuelve a Málaga. Las dos grandes victorias de la selección española de baloncesto tienen ese nexo en común, justo después, se juega la competición en la capital de la Costa del Sol. En 2006 España venía de proclamarse campeona del mundo en Saitama (Japón), el mayor logro de nuestro baloncesto, y el anfitrión presentaba en su plantilla a tres campeones del mundo en la cancha, Carlos Cabezas, Berni Rodríguez y Carlos Jiménez; y a uno en el banquillo, Manolo Rubia. Han pasado nueve años, Carlos y Berni siguen jugando lejos de Málaga y Jiménez forma tándem con Manolo Rubia en los despachos de Los Guindos.

Nadie tenía en aquella edición más campeones que el equipo cajista. El Real Madrid presentaba dos, Felipe Reyes y Álex Mumbrú; el Barcelona uno, Juan Carlos Navarro; y el DKV Joventut otro, Rudy Fernández. Esta noche, después de la épica victoria en el Eurobásket de Francia, los medallistas van a estar al otro lado de la cancha. El Real Madrid presenta a cinco campeones de Europa, Felipe, Sergio Rodríguez, Sergio Llull, Rudy y Willy Hernangómez y hasta a un subcampeón de Europa, Jonas Maciulis y otro de América, Andrés Nocioni. El Unicaja solo presenta una medalla de plata, la obtenida por Mindaugas Kuzminkas. Pero estas preseas y los títulos blancos de la temporada pasada más que un obstáculo pueden ser una gran oportunidad para el Unicaja.

El Real Madrid lo ha ganado todo pero la mochila del cansancio está muy llena a pesar de que la temporada todavía no ha comenzado. Los cinco campeones blancos y Maciulis llegaron de Lille, después de dos meses de concentración y partidos, y después de sólo 36 horas en España, la mayoría gastadas en celebraciones, volaron a Brasil para ganar la Copa Intercontinental, mas de 8.000 kilómetros que para la espalda de Rudy y las articulaciones de algún otro jugador fueron demasiado.

Ahora Málaga y dentro de seis días los Boston Celtics en Madrid, el día 11 debut en la ACB ante el Valencia y de postre debut en la Euroliga en Moscú ante el Khimki, otros casi 7.000 kilómetros. Además Ayón y Nocioni han jugado el torneo de las Américas lo que provoca que ante la lesión de Taylor, Pablo Laso haya realizado una pretemporada con sólo dos jugadores séniors, Carroll y Thompkins. Muchos retos físicos y mentales de primer nivel que en algún momento pueden pasar factura.

El Unicaja ha tenido un verano más tranquilo. Sus niveles de cansancio, mental y físico, a estas alturas son mucho menores y esa es la gran baza verde. La pretemporada también ha dejado muchas notas positivas. No todo es ganar o perder partidos. La última gran noticia es la aportación de Richard Hendrix en la Copa Andalucía. Si el pívot de Alabama mantiene ese nivel, Plaza tendrá a uno de los mejores jugadores de la competición a sus órdenes. El hándicap de no contar con los dos bases, Nedovic y Markovic, durante la pretemporada parece un problema superable para Joan Plaza dada la calidad de sus jugadores y la motivación de cara al partido.

Mientras que para el Real Madrid será un partido más en una maratón de citas imprescindibles, para el equipo verde es «EL PARTIDO». Esa motivación y el empuje del Carpena, una vez más lleno a rebosar, debe ser un gran argumento para pensar en ganar. Suerte