Tengo una fotografía de hace 65 años expuesta en el Liceo Cultural Blas Infante de Torremolinos donde aparecen mi padre, un grupo de artistas malagueños de aquella época y, en la parte derecha de la fotografía, se ve a un jovencísimo Chiquito de la Calzada luciendo un tirolé de lana. En esta fotografía se concentra la Málaga flamenca de hace casi 70 años. Uno por uno se puede ir definiendo el nombre artístico de cada persona que aparece en esta foto sepia. Mi padre era un gran conocedor del flamenco y aficionado muy respetuoso hacia este patrimonio inmaterial de la humanidad. Organizaba veladas flamencas donde Chiquito, La Repompa, El niño de las Moras, El niño de la Isla, El niño Cártama y otros muchos artistas de flamenco, que esas noches que había juerga flamenca se llevaban el sueldo pá' la casa. Estamos hablando en el contexto de la plena Andalucía del hambre, la miseria y las enfermedades. Yo nací en calle Tacón y Chiquito en la Calzada de la Trinidad, pegadito a Dulces Angulo. Todavía no había nacido el Torremolinos del mañana y el jaleo ni el Victor's Bar. De hecho, no existía ni el Hotel Pez Espada. A partir de ese momento, estas figuras empezaron a comer como dios manda. Gregorio tuvo mucho y muy entrañable contacto con mi padre, ya que mi padre quería y era muy querido en la Málaga cantaora de los años 40 y 50. Estando al lado de mi padre nadie se quedaba sin llevarse un duro a su casa y comerse un plato de morcilla y otro de aceitunas partías con pan. Chiquito de la Calzada como artista un genio, como persona aún mejor. Picasso fue un genio en lo suyo y Chiquito otro en su terreno artístico y personal. Espero que muy pronto se recupere y siga siendo la persona que siempre ha sido. Probablemente ya no recordará a Bartolo 'El del Muelle', un hombre que reconoció su arte y su inconfundible simpatía.