Una vez más el periodismo con mayúscula salvó el día. El sábado pasado, con tiempo hostil, hace hoy una semana justa, se concentraron unos admirables malagueños en la entrada del puerto. Honraron así a su ciudad. Con inteligencia y con valor. Una vez más fueron civilizadas su protesta y su alarma ante la creciente amenaza del proyecto de hotel-rascacielos del puerto de Málaga.

Mi buen amigo Alfonso Vázquez publicó el día después en este periódico una espléndida crónica sobre ese encuentro. Se lo agradeceré siempre. Por pequeños problemas de salud no pude asistir. Las palabras y el talento de Alfonso lo remediaron. Sentí que había estado en el acto y que gracias a un gran periodista conocía todos sus pormenores. Entre ellos, las magníficas intervenciones del portavoz de Defendamos Nuestro Horizonte, Juan Antonio Triviño, del profesor de la UMA Rafael Esteve Secall y del arquitecto Luis Ruiz Padrón. Y de tantos otros. Y “last but not least” pude leer las palabras apasionadas que pronunció mi buen amigo, el profesor Teodoro León Gross. Que nos recordó que “tenemos la razón de nuestra parte y la pasión”. Ellos dieron luz a una jornada que podía haber sido oscura. Pues se acerca la maquinaria anunciada que podría destruir tanta alma y tanta belleza de esta Málaga nuestra.

Por eso, como tantos otros ciudadanos, he entregado en las dependencias del urbanismo municipal este modesto alegato contra ese proyecto. Me permito la libertad de compartirlo con ustedes:

ALEGACIONES

1.- Mis experiencias profesionales durante más de cincuenta años en el mundo hotelero y turístico me aconsejan, como un ineludible deber moral, el emitir una opinión absolutamente desfavorable a la construcción del proyectado hotel torre del puerto de málaga.

No solo por ser éste algo totalmente negativo para los intereses turísticos presentes y futuros de málaga, la ciudad en la que nací, ya que tal como se ha expuesto repetidamente desde diversos ámbitos, la amenaza se cierne también sobre todos los enclaves turísticos de la costa del sol malagueña. “el efecto dominó” no es solo un temor. es una certeza.

2.- Por idénticos motivos, en enero del 2014 el ayuntamiento de marbella decidió suspender y archivar la normativa que hubiera permitido la construcción de varios rascacielos en el término municipal marbellí. la reacción fulminante de la ciudadanía y los expertos de la pujante industria turística de marbella ante este atentado, así lo aconsejó a las autoridades locales.

En esa ocasión prevaleció la sensatez y la firme determinación de autoridades y ciudadanos de evitar situaciones como las que en otras recientes y no deseables aventuras políticas habían estado a punto de llevar a la ciudad de marbella al desastre.

3.- Sería lamentable que en la ciudad de málaga, protagonista en la actualidad de un espectacular renacimiento turístico, se cometiera un gravísimo error que nos llevaría de nuevo a un pasado que todos lamentamos. en el que el litoral mediterráneo español ha sido demasiadas veces víctima de la codicia y la ignorancia de unos y otros.

En virtud de lo expuesto, solicito: Que teniendo por presentado este escrito, se sirva admitirlo, tenga por formuladas las alegaciones que constan en el cuerpo de este, con el objeto de que sean tenidas en cuenta en el procedimiento de referencia y se resuelva éste mediante Resolución Denegatoria a la solicitud presentada por la Autoridad Portuaria de Málaga.