Detrás de los cristales llueve y llueve. Sobre los chopos medio deshojados, sobre los pardos tejados, sobre los campos, llueve... Pero esta noche dejará de hacerlo para no mojar la alfombra roja de los Goya, en Málaga. Goya se llamaba el cine que en esta ciudad de cine estaba en la céntrica calle Calderería, donde aún resisten unas galerías comerciales, muy cerca del edificio donde comenzó este periódico hace algo más de 20 años. Y en el cine Goya, el día que nevó en Málaga en 1954, ponían 'Niágara', que es lo que parecía alguna calle de la zona este de la ciudad la mañana del pasado jueves, una catarata de granizo.

Nieve

Pero Marilyn Monroe -anunciando Niágara, pintada en el enorme cartel en la fachada del cine Goya, aquel 3 de febrero de hace casi sesenta y seis años- no miraba granizada alguna, sino cómo caía la nieve en Málaga. Cómo de bonito, de divertido y de bien lo contaba ayer en el periódico Alfonso Vázquez. Hoy vamos de Goya a Goya y habiendo tenido además el primer cabezón factura malagueña, la del escultor Miguel Ortiz Berrocal que fabricó el primer diseño sobre el busto de Benlliure. Ése fue el Goya que se llevó la película 'El viaje a ninguna parte', dirigida por Fernando Fernán Gómez en 1986, quien 11 años más tarde sería homenajeado en la también primera edición del Festival de Málaga. De Málaga a Málaga.

Actores

Lloverán «cabezones» esta noche en el palacio Martín Carpena, felizmente reconvertido de palacio de los deportes a palacio del cine. Así se llamaba, Palacio del Cine, el cine que había en calle Mármoles. Cantará el malagueño Pablo Alborán y el malagueño Antonio Banderas que, todo parece indicar, que se volverá con su Goya puesto por su papel en 'Dolor y Gloria', en el que hace de Almodóvar y un poco de sí mismo y algo de todos nosotros con una madurez que han celebrado también en la academia de Hollywood. Aunque el malagueño Antonio de la Torre, en su decimocuarta nominación y pese a haberse llevado a su casa de Sevilla el Goya al mejor actor el pasado año, también podría llevárselo por su intenso topo en 'La Trinchera infinita'. Y ambos con permiso del estupendo Karra «Unamuno» Elejalde que brilla en 'Mientras dure la guerra', una película de Amenábar, de la que ya hablamos en esta página, que resulta altamente recomendable. Y con permiso, porque siempre está bien en lo que hace, de Luis Tosar en su papel de enfermero y no digo más en 'Quien a hierro mata'.

actrices

Y la malagueña y sevillana (en Sevilla nació y aquí se crió para las tablas) Belén Cuesta también podría lucir su singular desparpajo a la hora de recoger el Goya a la mejor actriz por su dramática réplica a De la Torre (Antonio, no Paco), como la mujer del marido encerrado durante décadas en su propia casa, incluso mientras no dura la guerra. Pero eso será con el permiso de Penélope Cruz, aunque el papel de Penélope es corto en 'Dolor y Gloria', pese a que ella haga que no lo parezca tanto, casi de reparto. Y con el permiso de la joven Greta Fernández que ya se llevó la Concha de Plata en San Sebastián por su papel en 'La hija del ladrón', película con la que su novata directora Belén Funes -que ya triunfó en el Festival de Málaga con su corto 'Sara a la fuga'- radiografía la dificultad de conseguir una hipoteca, un trabajo y un techo donde criar a su bebé que sufren muchas Saras. Y de Marta Nieto, cuya intensidad en 'Madre' de Sorogoyen le ha valido la nominación, una historia que también parte de un corto anterior que se coló en los Óscar.

Glamour

Respecto a esas actrices y a las nominadas como mejor actriz de reparto: Mona Martínez (otra andaluza), Nathalie Poza, Natalia de Molina (jiennense y malagueña) y la veterana Julieta Serrano (a la que también le dimos la biznaga Ciudad del Paraíso en el Festival de Málaga), será divertido, como siempre, seguir los vestidos que llevan puestos estas mujeres fuertes, los diseñadores que hay detrás y todo lo del glamour que conlleva la gala y una parte del show cinematográfico y televisivo, pero el cine es más lo que cuentan sus personajes que eso, aunque a veces sea eso lo que trascienda tanto. Sea.

Goya

Tampoco estaría mal que el malagueño Pablo Barce se hiciera con el Goya al mejor corto de ficción por su película 'El nadador'. Y estaría muy bien que 'Klaus', la peli de animación que recordábamos aquí el sábado pasado y que se ha colado en los Óscar, se llevase su Goya, porque en la producción de esa historia de Navidad -que podemos ver y es recomendable en cualquier momento del año, aunque no nieve ni granice en Málaga cuando lo hagamos- quizá haya también gente de Málaga. Ho ho ho... Así que, aunque el cine París de mi infancia lo convirtieron en un bingo, y ya no queden cines de barrio, ni el Carranque, ni el Zayla, ni el Coliseum, ni el Cayri, ni el Regio ni siquiera el primer multicines que vino a terminar con aquellos, el América Multicines, el cine seguirá soñando con la realidad y nosotros con él. Por lo demás, Fitur se acaba...

Porque hoy es sábado.