Opinión | Memoria en blanco y negro

Más moral que el Alcoyano

Que el fútbol ya no es lo que era ya lo sabemos todos, y que el potencial de los equipos obviamente se mide por su poder económico también se da por hecho, aunque yo en esto último discrepo considerablemente. A diferencia que en la Fórmula 1 o el Campeonato de Motociclismo donde para ganar has de ser buen piloto, pero sobre todo tener el coche o moto más rápida, al fútbol se juega con el alma. La maquinaria del corazón es la que mueve a un deportista/futbolista a alcanzar sus mayores logros si sabe exprimirse bien, así que por mucho presupuesto que tenga un club y por muy afamados que sean sus jugadores, si no pones sobre el terreno de juego lo que hay que poner, al final no lograrás tu objetivo. Y es ahí cuando la frase de «más moral que el Alcoyano» cobra su grado superlativo.

Y eso es precisamente lo que ocurrió el pasado miércoles, 20 de enero de 2021, en la eliminatoria de dieciseisavos de final de la Copa de Rey, de manos precisamente del equipo que lleva la frase a su máximo exponente, el C.D. Alcoyano. Su gesta ante el todopoderoso Real Madrid ha llevado, al menos por un instante, la felicidad a una ciudad devastada por la pandemia como es Alcoy.

Como suele ocurrir en los días previos y prolegómenos de los partidos con rivales tan distantes, David siempre se siente muy pequeño ante Goliat, hasta que las pulsaciones aumentan y el corazón se pone a mil perdiendo toda la racionalidad al romper a sudar como «pollos». Ahí es cuando el ser humano del mundo balompédico se pone en igualdad de condiciones independientemente de la categoría en la que milites o el salario que te lleves al bolsillo. Eso es lo que precisamente ocurrió en el Campo Municipal de El Collao.

Como así marcaba la lógica con el pitido inicial del colegiado, los blancos se apoderaron de la posesión del balón y asediaron la meta rival con alevosía. Mientras tanto, los del Valle de Alcoy, se amotinaban en torno a la gran figura de la noche, el meta José Juan, que a sus 41 años de edad, viviría el sueño más bonito de su vida. El equipo pequeño y con la única arma que poseía quiso dejar todo el peso del partido en manos del grande para salir a la contra ante cualquier descuido que tuviese. Pero la solvencia de los blancos apenas dejó pasar del medio campo a su rival, acumulando ocasiones de gol, una tras otra, hasta que a punto de echar el cierre al primer acto, un soberbio testarazo de Éder Militao les adelantaba en el marcador. 0-1 al descanso y la lógica parecía imponerse.

Tras la reanudación, más de lo mismo. Un Madrid dominador continuaba con su «confiada» superioridad frente a su adversario, el cual tímidamente pretendía poner en apuros al debutante Lunin. Los minutos pasaban y José Juan se convertía en la ‘araña negra’ de Alcoy, infranqueable por todos los costados. Las manecillas del reloj avanzaban generando curiosamente más preocupación en los blancos que en su rival a pesar del gol a favor.

Quedaban apenas diez minutos para el final, los ataques capitalinos cada vez eran más tímidos y su fondo físico comenzaba a resentirse. Y entonces fue cuando a grito pelado de Vicente Parras, entrenador local, el Alcoyano con un nivel de preparación físico impresionante, se fue arriba en busca del empate que de forma increíble se produciría en el minuto 81 por medio de Solbes.

La sorpresa invadió a propios y extraños, pero sin alcanzar aún su mayor grado de estupefacción. De forma increíble se llegaba al final de los 90 minutos con 1-1 en el marcador, lo que obligaba a la disputa de una prórroga.

Y fue en el tiempo suplementario cuando el Alcoyano alcanzaría tocar el cielo. Una contra bien llevada por la parte izquierda fue rematada por Juanan Casanova anticipándose a la salida de Lunin. Corría el minuto 115 cuando el milagro se acababa de obrar: «La que acabamos de liar» exclamaban los jugadores locales ante la incredulidad de los de Zidane.

El resto ya fue historia, la que dejaron marcada para la eternidad en una fría noche invernal: José Juan; Jordán, Primi, Raúl, Pablo Carbonell; Alberto Rubio, Jony, Juanan, Ángel López; Mourad El Ghezouani y Jona Mejía. También jugaron: Jorge Moltó, Javi Antón, Ramón López, Alí Diakaté, José Solbes y Juli. Sois ¡HÉROES!