Opinión

María Faes Risco

Cartas de los lectores

España, descentrada

La última crisis de Ciudadanos, con la dimisión de su enésimo presidente, Adrián Vázquez, que pretendía «integrarlo» en el PP, es otra clara prueba de hasta qué punto somos un país descentrado, poco dialogante, apenas democrático. Así ese partido «centrista·, que nunca miró siquiera a una ·izquierda» como el PSOE, tan débil que no se atrevió a cambiar leyes autoritarias del PP, mientras florecían una ultraizquierda y una ultraderecha, hoy ambas en plena crisis, como también, por corrupción económica y política, los dos partidos más votados.