«Santificarás las fiestas», dicen los diez mandamientos. Sin embargo, varios siglos después de su martirio, Málaga sigue arrojando piedras sobre San Ciriaco y Santa Paula, que un año más celebran hoy su festividad siendo un día laborable. Así el arraigo es imposible, pese a ser los patronos más antiguos de la ciudad, pocos los conocen. Y eso que aparecen hasta en el escudo de armas. En papeleras o en los taxis.

Eran dos jóvenes malagueños que fueron torturados en tiempos del emperador Diocleciano (305 d. de C.) por defender la doctrina cristiana. Tras ser Málaga conquistada a los musulmanes en 1487, los Reyes Católicos se dirigen el Papa, para comunicarle el considerable avance de la fe cristiana. El Pontífice respondió proponiendo a estos dos mártires como patronos.

En 1987 el Ayuntamiento les quitó el festivo, una decisión provisional que acabó durando 25 años. En 2013 se recuperó tras mucho trabajo y reivindicaciones, una moción institucional avalada por los tres grupos municipales (PP, PSOE e IU) y que fue aprobada sin fisuras en pleno municipal. Pero lo que el pleno dio, el pleno lo quitó, aunque esta vez sólo con los votos favorables del equipo de gobierno. Y al año siguiente el 18 de junio dejó de nuevo de ser festivo. Fue un espejismo.

Pese a este revés municipal, para evidenciar que la congregación mantiene su reivindicación histórica, la congregación mantiene este día como el principal de sus cultos, incluida la procesión de las imágenes de los patronos por las principales calles de la ciudad. La jornada comenzará con una misa a las 11.00 en la iglesia de los Santos Mártires en la que participará el arciprestazgo de Santa María de la Victoria. A continuación, a las 12.00 horas los santos serán trasladados a la Catedral, donde por la tarde se celebrará una solemne misa estacional.

Será a las 19.00 horas y estará presidida por el obispo de la diócesis, Jesús Catalá. Tendrá lugar justo antes de la procesión triunfal de regreso a la sede canónica, y que comenzará a las 20.30 horas. El itinerario será el siguiente: Patio de los Naranjos, Santa María, plaza del Obispo, Molina Lario, Sancha de Lara, Larios, plaza de la Constitución, Granada, Santa Lucía, plaza Jesús de la Pasión, Santa Lucía y plaza de los Mártires Ciriaco y Paula, donde se encerrará en su templo.

Las bandas de cornetas y tambores de la Estrella y del Carmen participarán musicalmente en la procesión -ésta última también lo hará en el traslado de la mañana, hasta el Primer templo-.

La congregación estrena este año las cabezas de varal del trono, procedentes de las Reales Cofradías Fusionadas de San Juan; un granado natural en el trono, en sustitución del árbol simulado, y las camisas bordadas con el escudo de la congregación para los portadores, y que sustituyen a las túnicas.

Algunos bares, restaurantes y comercios de la capital malagueña se han unido este año a la celebración ofreciendo tapas o platos con el nombre los Santos Patronos y descuentos a quienes se llamen Ciriaco o Paula. Especial dedicación, la de los bares cofrades.

La congregacion informó en una nota que en la hostelería destacan el Café Central (una tapa para cada santo), El Kapote, El Pimpi, L´Expèrience (ajoblanco malagueño), Entre Varales, La Esquinita del Chupa y Tira, Las Merchanas, Lo Güeno, Los Hidalgos, Mil Sabores (ensalada tropical Santa Paula) y Taberna del Capataz.

Así, Carlos Cordero, cocinero de Lo Güeno, cocinará en directo un Rape en salsa de almendra, a las 19.30 horas, en el programa Mesa y Mantel de PTV-Málaga. El Pimpi, por su parte, mantendrá el menú especial durante una semana, hasta el lunes 22 de junio. A Santa Paula le dedica la paella malagueña y a San Ciriaco el chivito malagueño a lo pastoril. Y para postre, la Tarta Martiricos que ha encargado un establecimiento del barrio de la Victoria.

Libritos, Zaldihogar, Cerería Zalo, Olivares, Calzados Alas y la Romería, entre otros, harán descuentos a quienes acrediten llevar el nombre de los Santos Patronos.