Marina Martín, jugadora del Rincón Fertilidad Málaga y estudiante de Medicina en la Universidad de Málaga, espera las decisiones tanto en el ámbito deportivo como estudiantil aunque, bajo su opinión personal, cree que no será fácil reiniciar la competición en la Liga Guerreras Iberdrola ante el riesgo que supone la práctica de un deporte de contacto.

Además, reconoce que vive mucha incertidumbre y que no le gusta nada. La jugadora ha realizado una entrevista para los canales oficiales de la Federación Andaluza de Balonmano, en la que ha dejado sus impresiones sobre la situación actual por la crisis del coronavirus y cómo está afectando a su vida a nivel deportivo y académico.

Pregunta: ¿Cómo lleva el confinamiento?

Respuesta: Bien, como se puede. Como todo el mundo, tengo mis días buenos y mis días regulares, pero intentando asimilarlo, aceptarlo, intentar ponerme unos horarios para pensar lo menos posible que estoy encerrada y conseguir aprovechar el tiempo.

P: ¿Cómo es un día en su vida durante el último mes?

R: Me levanto temprano, me pongo a estudiar, reviso el campus virtual de la universidad por si hay novedades o algún trabajo o seminarios virtuales. Luego descanso, leo o escucho música, vuelvo a estudiar antes de entrenar y luego, por supuesto, el aplauso de las 20:00. Ya por la noche desconecto, veo la tele y me pongo a jugar con la familia a algún juego de mesa.

P: ¿En el Rincón Fertilidad Málaga están trabajando de forma diaria para seguir en un estado óptimo de forma?

R: Por supuesto. Todos los días las rutinas las está llevando José Luis, el preparador físico. Por la mañana temprano ya nos manda el entrenamiento, con sus explicaciones con un vídeo para que sepamos cómo hacerlo. Pero se echa de menos la parte de balón, es cierto, aunque estamos intentando mantener la forma para estar lo mejor posible ante cualquiera de las circunstancias que se presenten.

P: Pese a tener una vida bastante ajetreada con sus estudios de Medicina, seguro que está echando de menos el ir a entrenar.

R: Muchísimo, porque al final, sobre todo en la época de exámenes, yo ya estaba de por sí encerrada. Pero el entrenamiento me servía para desconectar, salir un rato a la calle, hablar con la gente, reírme, desfogar, dejar de pensar en los estudios esas dos horas. Y ahora eso que debía hacerme desconectar no lo tengo, sigo en mi casa que me recuerda al estudio, así que lo echo mucho de menos.

P: Una época de mucha incertidumbre, tanto en el tema deportivo como en el académico. No debe estar siendo fácil.

R: Yo soy muy cuadriculada y esto lo llevo fatal. La incertidumbre no me gusta, Yo soy muy planificada y me gusta todo tenerlo cuadrado para que me dé tiempo a estudiar o con las competiciones poder ir pensando en el partido siguiente. Y eso lo llevo muy mal, porque en la Universidad ni sabemos cómo nos van a evaluar, ni las fechas en la que serán, y te da una incertidumbre porque ni tienes la presión de ponerte a estudiar fuerte porque sabes la fecha de tu examen pero tampoco lo puedes dejar, porque puedes encontrarte el examen en cualquier momento. Sólo sabemos que van a cambiar los criterios de evaluación, pero no saben qué método utilizar.

P: Tampoco está resuelto el tema de cómo acabará la temporada en la Liga Guerreras Iberdrola, si se podrá retomar o no.

R: Otro dilema. Yo debo tener los exámenes en junio. Si por un casual se retoma la liga en junio, tendría que compaginarlo todo de nuevo, que sería miércoles y sábado si no terminan alargándolo a julio, que ya implicaría parte de las vacaciones y del tiempo de recuperación para volver más fuertes a la pretemporada. Una pena la Copa de la Reina, que encima iba a ser aquí, que estábamos ya mentalizadas, con todo preparado, y pensar que no se juegue o que se haga a puerta cerrada son cosas que en mi cabeza no caben.

P: Desde su punto de vista, ¿es optimista o pesimista con la posibilidad de que se puede retomar la competición?

R: Por lo que he visto y lo que conozco, en este aspecto soy pesimista, en el sentido de que debe primar la seguridad y la salud. Ahora por ejemplo hemos visto en China que se dio un repunte por los casos nuevos importados. Si ahora que estamos bajando un poco el número de contagiados y la gente se está concienciando hay un repunte por intentar, a lo mejor antes de tiempo, que la vida vaya volviendo a su cauce normal y se vuelve a colapsar urgencias y el sistema sanitario, vamos a estar aún peor que lo que hemos estado. Porque al final la economía va a ser un desastre si tenemos que volver a parar el mundo de nuevo.

P: Considera mejor tomarnos con más calma el poder retomar el camino ahcia volver a tener una vida normal.

R: Creo que es preferible esperar un poquito más para comenzar a arrancar, que progresivamente vayamos saliendo a calle. Pero, refiriéndonos al balonmano, nuestro deporte es de contacto, no se puede evitar el contacto físico, ahí hay un peligro de contagio. Y, desde mi punto de vista, el balonmano y el deporte en general está hecho para que la gente lo vea, si lo haces a puerta cerrada no disfrutas tanto, es más una obligación que un disfrute el jugar.

P: Para finalizar, me gustaría saber qué siente cada día a las 20:00 horas con el aplauso a los sanitarios.

R: El primer día que lo escuché se me saltaron las lágrimas porque a mí me emociona mucho. Ya no sólo porque estudie medicina, que también es motivo porque piensas que en algún momento tú estarás ahí y que ese aplauso en un futuro puede ir para ti, pero te llena el corazón y da fuerzas para seguir estudiando para una profesión que sabes que amas y quieres. Y todos los días, esté haciendo lo que esté haciendo, paro para asomarme y aplaudir. Me encanta hacerlo.