Liga Endesa/Jornada 33

El Unicaja no quiere jugar el play off (78-101)

Derrota de los de Fotis Katsikaris en el regreso a Málaga de Luis Casimiro, al mando ahora de un Casademont Zaragoza que se dio un festín a costa de un paupérrimo equipo cajista

Emilio Fernández

Emilio Fernández

¡Qué desastre! ¡Qué horror! ¡Qué manera de complicarse la vida! ¡Qué mala imagen! ¡Qué decadencia más absoluta!... Un Unicaja paupérrimo, sin intensidad, sin ideas, sin continuidad, sin defensa y sin nada de nada de nada jugó 40 minutos ridículos ante el Zaragoza que le dejan tocado en lo deportivo y todavía más en lo anímico... si es que a esta plantilla le queda una pizca de alma.

Hay que ser sinceros: Este equipo es una ruina absoluta. Está k.o, no le funciona nada y ya ni el "factor Katsikaris", que pareció revitalizar a la plantilla en las primeras semanas del técnico griego en Málaga, sirve ahora para que el equipo sea ni siquiera mínimamente competitivo ante cualquier rival liguero.

El Unicaja no quiere jugar el play off por el título de esta Liga Endesa 20/21. Y si quiere jugarlo, lo disimula muy bien. Con actuaciones como ante el Zaragoza es imposible ni soñar con estar entre los 8 mejores cuando la Fase Regular baje el telón. En un partido de esos que había que ganar sí o sí, los verdes sumaron una dolorosísima derrota ante el nuevo equipo de Luis Casimiro, que vengó su despido de hace tres meses con un triunfo tan convincente como merecido en el Palacio.

El sonrojante 78-101 aleja casi definitivamente a los verdes del sueño de la séptima plaza, pero es que le complica sobremanera también la octava, dejándole ahora en una situación de máximo riesgo de fiasco gordo en un esprint final de Liga Regular en el que habrá que hacer ya alguna "machada" en Vitoria o ante el Madrid para cumplir con el objetivo... salvo que los que vienen por detrás también fallen.

Es casi imposible jugar peor de lo que lo hizo este sábado noche el Unicaja. Fue un juguete en manos del rival desde el minuto 3 del primer cuarto, evidenció sensaciones penosas y mostró en los jugadores un lenguaje corporal individual y de equipo preocupante.

Luis Casimiro jamás pudo soñar con un regreso tan plácido a la que fue su casa las dos últimas temporadas y media. Su Zaragoza ni sufrió. Dominó el marcador de principio a fin para borrar de la pista a un Unicaja que seguro que agradeció que el pabellón estuviera vacío. Porque si el Carpena llega a tener esta vez a su "Marea Verde", más de uno se hubiera llevado la pitada del siglo y con toda la razón del mundo.

El primer cuarto del Unicaja ya fue horripilante. Un día más, el equipo fue un coladero atrás. El Casademont Zaragoza corrió y anotó cómo y cuándo quiso. Hasta el 14-15 hubo equilibrio, pero un parcial después de 2-12 permitió una renta de 11 arriba al llegar al minuto 10 a favor de los de Casimiro, 16-27. Katsikaris, a esas alturas, ya lo había intentado casi todo. Había jugado con sus 10 profesionales "sanos", pero nada de nada.

Liga Endesa | Unicaja Málaga - Casademont Girona

Liga Endesa | Unicaja Málaga - Casademont Girona

Los tiros siguieron sin entrarles a los artilleros verdes en el segundo cuarto y la imagen fue de mal en peor. El Zaragoza aprovechó el desastre verde para irse de 14, 15, 16, 18... y hasta de 20, 26-46, a poco más de 2 minutos para el descanso. Solo el rebote ofensivo permitió al Unicaja en ese tramo del partido que la sangría no fuera todavía más sonrojante al llegar el intermedio: 33-46.

El paso por los vestuarios pareció cambiar la cara al equipo de Los Guindos. Dos robos de balón, dos buenas defensas, dos ataques con sentido y el marcador se fue al -10, 37-47. Pero solo fue un bonito espejismo. Y es que ahí acabó cualquier atisbo de intento de remontada. Los maños reaccionaron con un 0-7 que frenó en seco el buen inicio del segundo tiempo, 37-54 y provocó que Katsikaris parara el partido. El parcial creció todavía más y el Zaragoza se puso 26 arriba, 45-71, en el esprint final del tercer cuarto. Al llegar al minuto 30, el partido estaba "muerto", 51-75. El último cuarto, de hecho, no tuvo ninguna historia. Solo la de ver hasta dónde llegaría el sonrojo final, que fue 78-101.

La jornada 33 de la Liga ya es historia. La 34 pasará de largo porque el Baskonia-Unicaja del próximo jueves está aplazado por el brote de coronavirus que hay activo en el vestuario de los baskonistas. La siguiente cita será el sábado que viene, a las 20:45 horas (otra vez) ante el Joventut, en otro duelo directísimo por la zona de play off. Habrá que ver si es con o sin Gal Mekel y si es con o sin Yannick Nzosa. Sea con los dos, con uno de ellos o sin ninguno, será la "última" final para seguir soñando con un play off que da la impresión, a veces, que sería mejor ni jugarlo.