Al menos hasta finales de año, los pescadores deberán seguir usando las redes para el arrastre impuestas por la normativa europea. Representantes de las distintas cofradías de pescadores del Mediterráneo mantuvieron ayer un encuentro en Madrid con el director general de Recursos Pesqueros y Acuicultura del Ministerio de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente, Ignacio Escobar, para buscar soluciones ante las nuevas mallas que los pescadores tanto de Caleta de Vélez como del resto de la provincia deben utilizar desde octubre de 2012.

Tras el encuentro de ayer se acordó que cada cofradía de pescadores deberá presentar alegaciones al anexo de la ley que especifica que el torzal que deben tener las redes sea de un tamaño de tres milímetros, frente a los de cinco milímetros de las anteriores. Esto provoca pérdidas en el volumen de capturas de casi un 60% según cifraban fuentes del sector, así como daños en algunas especies marinas debido al reducido tamaño del hilo.

Los trámites que deberán seguir las cofradías de pescadores serán los de presentar toda la documentación referente a la imposición de las nuevas mallas, así como fotografías y datos relacionados con la pesca en las respectiva zonas, que después se enviarán a la Dirección General de Pesca. Con ello, se realizará un informe conjunto de todas las alegaciones que se presentará en Bruselas, para que planteen las excepciones pertinentes, si proceden, a la pesca en el Mediterráneo.

Hasta entonces, los pescadores deberán seguir utilizando las nuevas redes. Según el patrón mayor de la cofradía de Caleta de Vélez, José Luis Guerrero, la tramitación podría alargarse un año. Sin embargo, «según nos comentaron, este es un proceso más rápido que la visita de los observadores comunitarios que estaba previsto que vinieran para ver cómo funcionan las redes en esta zona, ya que tendrían que hacerlo en varios puertos», según Guerrero.

Precisamente, en octubre del pasado año, el Ministerio de Agricultura y Pesca se comprometió con los pescadores a que antes del mes de enero los técnicos comprobarían in situ las incidencias de las nuevas redes. Sin embargo, estas visitas no llegaron ni a Fuengirola ni a Caleta de Vélez, los dos destinos que iban a ser referencia de la pesca en el litoral malagueño.

El puerto de Caleta de Vélez, uno de los que mayor volumen de capturas registra a nivel provincial, cuenta con un total de 20 de las cerca de 50 embarcaciones que faenan por las costas malagueñas. Algunas de las especies afectadas por esta nueva imposición normativa y que captura el sector de arrastre son los chopitos, las gambas o los calamaritos.