­La música es para Wim Mertens un vehículo para llegar más allá, un elemento de trascendencia. El compositor belga está obsesionado por rubricar con sus partituras la atmósfera de la época en la que vive. Su singular voz de contratenor y sus proverbiales improvisaciones al piano se volverán a escuchar hoy en el Teatro Cervantes (21.00 horas), adonde regresa esta vez en formato de dúo con el acompañamiento de Dirk Descheemaker al clarinete y saxofón soprano.

Mertens acude a Málaga con una ingente producción discográfica bajo el brazo, coronada por un álbum, When tool met wood, que grabó con motivo de la Capitalidad Europea de la Cultura de Guimaraes (Portugal) en 2012. El autor de For amusement only reproducirá parte del contenido de este último trabajo, aunque sus incondicionales tendrán también la oportunidad de oír algunos de sus temas más emblemáticos.

Será la cuarta vez que este musicólogo por la Universidad de Gante y politólogo por la prestigiosa Universidad de Lovaina recala en el teatro municipal. Ya pisó las tablas del Cervantes en octubre del 96, en mayo del 99 y en mayo de 2012. Entonces ya recalcaba que cada concierto suyo es diferente, que siempre crea a través de sus improvisaciones, mediante decisiones que dependen del clima que encuentre en el patio de butacas.