Fernando Ramírez Baeza (Málaga, 1974) es directivo de Merlin Properties, la empresa inmobiliaria más importante de España que cotiza en el Ibex 35. Pero cuando termina su jornada y deja atrás los informes de inversiones, el análisis de activos o las operaciones de compra y venta de acciones bursátiles, vuelca buena parte de su tiempo libre y su atención en el teatro, un mundo al que llegó «de forma espontánea y autodidacta» pero que le está reportando muchas alegrías. Suyo es el libreto de Subprime, obra que ganó el Premio Carlos Arniches de la Muestra de Teatro Español de Autores Contemporáneos de 2009 y que fue estrenada en el Teatro Cervantes 2012. El próximo 10 de marzo, un nuevo montaje de su autoría volverá a verse en el primer escenario de su ciudad. Se trata de Faraday (El buscador), thriller que profundiza en el oscuro impacto de las redes sociales».

«Me marché a Madrid a estudiar la carrera de Empresariales en un colegio mayor y comencé a participar en un grupo de teatro, cuyo director nos inculcó los valores y la esencia del teatro. Al terminar los estudios, los que formábamos el grupo decidimos continuar con esa afición. Quedábamos los fines de semana y una vez al año representábamos una obra, tanto de textos clásicos como modernos. Y de forma espontánea surgió la idea de montar nuestro propio texto. Así fue como una noche comencé a probar y a descubrir un mundo nuevo y una maravillosa afición: la del papel en blanco», confiesa el dramaturgo malagueño.

Tras firmar algunas piezas, el galardón otorgado a Subprime le impulsó a entrar en el mundo del teatro «de manera profesional», aunque nunca se le pasó por la cabeza que un texto suyo «podría llegar a representarse o ganar un premio». Este montaje sobre la corrupción de los sistemas político y financiero recorrió buena parte de la geografía española con el respaldo de la crítica y el público. Para Ramírez Baeza, su máxima es lograr que la gente lo pase bien en el patio de butacas, sin por ello renunciar a la reflexión o la crítica a nuestra sociedad. Fórmula que se repite en Faraday (El buscador), donde se señala el «poder que atesoran Facebook, Twitter o Google, y cómo nosotros somos cómplices de ello al suministrarle el contenido a estas plataformas».

«Por mi edad, todo el cambio tecnológico me ha pillado en la juventud, no como las siguientes generaciones, que ya la tienen incorporada de serie y no conciben mentalmente cómo funcionaba el mundo sin teléfonos móviles e internet. Yo he ido creciendo con la revolución tecnológica y he ido pensando en sus aspectos positivos y negativos, como el poder que atesoran, sin que seamos conscientes, todas las empresas de tecnología. Hoy, cuando internet comienza a alcanzar su edad madura, está claro que lo que hacemos está en Facebook, porque la gente cuelga fotos de lo que hace; lo que decimos, de alguna forma está en Twitter, pero lo que pensamos, que es lo más peligroso, está en Goggle. Llevamos 15 ó 20 años preguntándole cosas a Goggle todos los días. ¿Qué pasaría si Goggle mostrase todo lo que tu vecino, tu hermano, tu padre o tu novia ha buscado en los últimos veinte años? Seguro que cambiaría nuestra percepción sobre estas personas».

Cinco semanas en Madrid

Pedro Miguel Martínez, José Manuel Seda, Alicia Montesquiu, Javier Collado y Ana Turpin forman el reparto de este montaje coral dirigido por Paco Macià que se estrenó el pasado mes de septiembre en Valdepeñas y que tras su paso por el Cervantes continuará con su gira por todo el país y que les llevará «durante cinco semanas a Madrid».

Fernando Ramírez Baeza, que asegura no tener cuenta en Twitter ni Instagram, sostiene que Faraday (El buscador) posee un ritmo trepidante que bebe mucho del lenguaje cinematográfico, otras razones más para no dejar pasar esta personal manera de hacer teatro.