Su canción ‘Black and gold´ (‘Negro y oro´) es ya un éxito que algunos comparan con el hit mundial ‘Crazy´, de Gnarls Barkley, y con ‘Crazy in Love´, otro temazo de Beyoncé. Su disco mezcla el disco-funk californiano de finales de los setenta con el glam londinense y el pop bailable actual. No en vano Sparro, músico, cantante, compositor, y productor, nació en Australia pero ha vivido en Los Angeles y Londres. Abiertamente gay, el joven artista cantó en coros de gospel en su infancia y se empapó desde niño de música negra.

¿Te ha sorprendido el éxito de ‘Black and gold´ en el Reino Unido?

Sí. Sabía que las canciones eran buenas y tenían mucho potencial para tener éxito, pero nunca esperas que ocurra algo así. Es un éxito tan grande... Todavía está en el ‘top ten´ y se ha convertido en una especie de banda sonora del año para mucha gente, lo cual es realmente fantástico.

¿Recuerdas cuando escribiste la canción? ¿Te diste cuenta en ese momento de que iba a ser un éxito masivo?

Sabía que estaba ante algo especial, la canción tenía potencial para ser un éxito, pero nunca sabes si va a ocurrir.

¿En qué pensabas cuando escribiste la letra de ‘Black and gold´?

Estaba en casa, buscando respuestas a las grandes preguntas de la vida, buscando a Dios. De eso trata.

El álbum es muy ecléctico, pero algunas de las canciones suenan muy funk. ¿Cómo absorbiste esas influencias ‘funky´ de finales de los setenta si tienes sólo veinticinco años?

Crecí en Los Ángeles y allí se escucha mucho de eso, es como una gran parte del paisaje musical de L.A. Allí hay muchas emisoras de radio que pinchan ese tipo de música. El funk, el soul y el hip hop de la Costa Oeste es parte del sonido de la ciudad.

Al escuchar tu música mucha gente se sorprenderá de que eres blanco, porque tu sonido parece muy muy negro. ¿Crees que la música está rompiendo los prejuicios raciales en Europa y no en América, donde existen diferentes listas de éxitos para la música ‘blanca´ y ‘negra´?

Sí. Creo que el mainstream en EEUU se comercializa para ganar tanto dinero como sea posible y hay muchos artistas que están saliendo y que no encajan muy bien en esas categorías. Ocurre incluso con artistas americanos como Kenna, que hace música que suena más a rock y es negro. También yo mismo, Amy Winehouse o Adele, que estamos bastante más influenciados por la música negra. Supongo que la gente está evolucionando en ese sentido.

¿Es verdad que la primera cinta que tuviste fue la de ‘I should be so lucky!´, de Kylie Minogue?

Sí, fue la primera cinta que me compré. ¡¡Tenía sólo siete años!! [risas].

No pasa nada, a mí también me gustaba esa canción en aquel entonces...

Oh, vamos, es una basura de canción [risas].

Utilizas el falsete en ‘Hot mess´, donde tu voz suena muy parecida a la de Prince. ¿Es él una de tus influencias?

Por supuesto. Me encantan sus primeros tres o cuatro álbumes. Luego perdí un poco el interés. Y sí, tenemos un registro vocal parecido. Él puede cantar como un barítono, llegar a notas muy altas.

También te comparan con Cee-Lo, el cantante de Gnarls Barkley, y dicen que ‘Black and gold´ será un éxito mundial de ‘soul´ como su canción ‘Crazy´. ¿Qué opinas de esta comparación?

Me deja perplejo, resulta muy halagador. Cee-Lo tiene una voz increíble y ‘Crazy´ es una magnífica canción. Veremos, el tiempo lo dirá.

Cuando eras niño cantaste en discos de gospel. ¿Ejerce alguna influencia sobre tu música este género musical?

Ya no estoy expuesto a la música gospel, no voy a la iglesia ni escucho emisoras de gospel, pero siempre me impresiona lo bien que puede llegar a cantar un coro de gospel.

La famosa cantante negra Chaka Kan fue una de tus primeras admiradoras, siendo un niño.

Es algo muy bonito, pero yo no la llamaría admiradora. Fue algo casual, canté para ella una vez y ella dijo que sabía cantar, lo cual fue un buen detalle, pero estoy seguro de que ella no se acuerda de aquello y no me reconocería si me viera hoy.

¿Vivir en Australia, Los Ángeles y Londres te ha ayudado a tener una mente abierta musicalmente hablando?

Sí. Crecer en entornos diferentes y ver y escuchar cosas diferentes me ha abierto la mente.