Cuando fue preguntado por su padre ante la prensa el motivo por el cual se mantuvo escondido durante tanto tiempo, Falcon Heene tuvo que recordarle a su padre que le había dicho que "lo hacían por el show". Parece que la inocencia del niño puede llevar al traste la historia supuestamente inventada por unos padres obsesionados con los fenómenos atmosféricos.

La necesidad de publicidad puede haber sido el causante de un suceso que mantuvo en vilo durante dos horas a Estados Unidos y a medio mundo. En España, varias televisiones interrumpieron sus noticiarios para conectar en directo con el sorprendente vuelo.

Mientras las audiencias se mantenian pendientes del plateado globo, el niño se manteníaperfectamente escondido en un doble techo del desván de su casa, inmune a las llamadas del grupo de búsqueda. Apareció cinco horas después del aterrizaje del extraño artefacto.

Luego vinieron las declaraciones del niño. Y la duda sobre la veracidad de toda la historia.