La principal recomendación de un profesional para evitar el cáncer de piel es no quemarse y en la Costa del Sol parece no tomarse muy en serio, ya que Málaga es la provincia con mayor índice de personas que sufren esta enfermedad. Así lo indicaron ayer Magdalena de Troya, jefa dermatológica del Hospital Costa del Sol; Nuria Delgado, técnico de educación para la salud del Distrito Costa del Sol, y Enrique Herrera Acosta, director de la unidad de Dermartología y Enfermedades Venéreas del hospital Clínico Virgen de la Victoria de Málaga, en el inicio de una campaña de fotoprotección para la prevención del cáncer de piel, que se llevará a cabo en ocho playas de la provincia durante los meses de julio y agosto.

Playamar, en Torremolinos, fue la zona elegida para el inicio de esta campaña, en la que bajo el lema Disfruta del sol sin dejarte la piel, se realizaron reconocimientos cutáneos a 120 bañistas, llevando a cabo valoraciones de los lunares de cada uno. Un equipo de ocho profesionales, formado por facultativos, enfermero y auxiliares, han organizado cuatro meses de trabajo para atender de forma gratuita a aquellos interesados en realizarse una exploración cutánea y obtener información sobre la prevención de esta enfermedad. Primero se valoraron los factores de riesgo de cada paciente, como su tipo de piel, color de ojos y pelo, si existen antecedentes en su familia de cáncer de piel o la cantidad de lunares que tenga. Posteriormente, se analizaron esos lunares utilizando un microscopio de epiluminiscencia y se les ofreció información. En la tercera mesa, ofrecieron muestras de protectores solares y dieron recomendaciones para la prevención y la detección precoz. Por último, se realizó una encuesta de satisfacción.

Los objetivos que se persiguen con esta campaña son sensibilizar a la población de los riesgos de la exposición solar y fomentar la técnica de autoexamen cutáneo. Magdalena de Troya insistió en la importancia de concienciar tanto a los profesionales como a la ciudadanía. Además, se mostró esperanzada en que en diez años se haya conseguido cambiar las conductas de los bañistas, reduciendo en un 50% el número de personas que toma el sol en las horas más peligrosas, ya que actualmente un 90% de la población se expone entre las 12.00 y las 16.00 horas.

Pero la Empresa Pública Costa del Sol y el Distrito Sanitario, organizadores de la campaña, reconocen que esta meta no es fácil. «Que demos información no quiere decir que la gente cambie sus conductas», indicó Troya. Otra de estas conductas es la de no usar protección solar (sólo un 50% lo hacen) y experimentar quemaduras en la piel provocadas por el sol, algo que duplica el riesgo de padecer un melanoma. «La gente tiene en su conducta que el sol y el bronceado son sanos, pero en realidad es un mecanismo de defensa de la piel frente a esa exposición. Además, la fotoprotección brilla por su ausencia y los índices de cáncer de piel van en aumento. Es una barbaridad», explicó Nuria Delgado. Estas conductas tienen sus consecuencias entre los diez y veinte años posteriores, que es el tiempo de latencia para que aparezca el cáncer de piel.

En la mañana de ayer se detectó un tumor a una de las bañistas que acudieron a la exploración, una mujer de edad avanzada. En estos casos, se les proporciona asistencia médica inmediata y se verifica el diagnóstico con pruebas más exactas. En el caso de tener que extraerlo, la intervención se lleva a cabo lo antes posible en el propio hospital.

A más lunares, más riesgo

Las personas que tienen más de 50 lunares tienen tres veces más riesgo de sufrir cáncer de piel. Esto se debe a que en la mayoría de los casos, tanto los melanomas como los carcinomas, aparecen encima de lunares que ya existen. El melanoma afecta a una de cada 75 personas, es el tipo más serio de cáncer en la piel, ya que puede llegar a causar metástasis, y tiene un mayor índice de mortalidad. El carcinoma afecta a una de cada tres personas y no llega a ser tan virulento como el melanoma.

En el caso de los melanomas, normalmente afectan a jóvenes de entre 20 y 40 años, mientras que los carcinomas suelen aparecer en las personas mayores. En estos casos, si el tumor detectado ha penetrado en la piel menos de un milímetro, le paciente tiene un 90% de posibilidades de sobrevivir. En cambio, si la penetración es de más de cuatro milímetros, se reduce al 40% el nivel de supervivencia. Para su detección precoz, los profesionales recomiendan aplicar la norma del ABCDE: Asimetría, Bordes irregulares, Color heterogéneo, Diámetro de más de seis milímetros y Evolución y cambios de color o tamaño.

Recomendaciones

Los especialistas insisten en que «no se debe buscar un bronceado que no corresponde» con cada tipo de persona y defienden que «la piel menos bronceada es mucho más hermosa, sobre todo a largo plazo, frente a la piel que ha sufrido muchas quemaduras por el sol, que es una piel vieja».

Para aquellos interesados, la próxima cita tendrá lugar el día 15 de julio y será en el chiringuito Las Gaviotas de la playa de Santa Ana, en Benalmádena. Para los que quieran participar en la campaña, el resto de fechas aparece en la web www.hcs.es.