Un centenar de alumnos de primero de Periodismo de la Facultad de Ciencias de la Comunicación de Málaga se manifestaron ayer por los pasillos y departamentos del centro académico protestando por la falta de espacio, que les obliga a dar sus clases separados de sus compañeros, en unas aulas acondicionadas al efecto en los sótanos del aulario Severo Ochoa, y por donde dicen que entra humo de los coches. «No se puede respirar. En un garaje damos clase», gritaban los estudiantes.

Según los conserjes, los alumnos invadieron algunas clases de la facultad y pasaron por los departamentos y decanato en masa, gritando y aporreando las puertas de los despachos. Durante su protesta, los manifestantes anunciaron una nueva concentración ante la sede del Rectorado, prevista para la próxima semana.

El decano de Ciencias de la Comunicación, Juan Antonio García Galindo, explicó que son alumnos de primero que, efectivamente, dan clases en el Severo Ochoa «en unos espacios aptos para la docencia». No obstante, reconoció que se pueden introducir mejoras en las clases, para lo cuál, el decanato ya está trabajando con el vicerrectorado correspondiente. «¿Que no es el mejor sitio? Sin duda, pero son aulas aptas», insistió.

García Galindo explicó que la adaptación de los cursos primero, segundo y tercero al plan Bolonia, que exige la reducción de los grupos, ha dejado pequeña la facultad, por lo que ha sido necesario trasladar a estos estudiantes al aulario, mientras que se acomete la construcción de un nuevo edificio, anexo a la facultad, que sirva para ampliar los espacios actualmente disponibles.

Pese a todo, el decano no entiende el motivo de esta manifestación, ya que hace unos días mantuvo una reunión con los representantes de los estudiantes, en la que les expuso las posibles soluciones, y quedó con ellos en mantener una nueva el próximo día 1 de diciembre, para tenerles al tanto de los avances.