El Festival de Cine Español de Málaga "saldará sus deudas" después de haber destinado al certamen el Ayuntamiento sendas modificaciones de crédito por importe de 350.000 y de 1,7 millones de euros, respectivamente, según ha informado hoy el director del certamen, Carmelo Romero.

A preguntas de los periodistas, Romero ha explicado en rueda de prensa que decidió reducir la plantilla del Festival al haberse optado por acotar las actividades del certamen a las puramente audiovisuales.

Ha precisado que esta reducción supuso "dos despidos disciplinarios", los anunciados el pasado junio del director ejecutivo del Festival, Franjo Parejo, y del coordinador general, Antonio Luque, y la rescisión de tres contratos temporales de personas "destinadas a actividades de producción".

Sobre la sentencia judicial que ordena la readmisión de Luque, Romero ha asegurado que el Festival "acepta todas las sentencias, las acata y las cumplirá, sean de un orden o de otro".

El director ha explicado que Luque se había aplicado a sí mismo un complemento salarial de más de mil euros mensuales y, según la información de la que dispone, "fue Luque quien dijo" a la empresa que gestiona el Festival "que se le introdujera una gratificación a Parejo del mismo orden que la que él tenía".

"Hay ocasiones en las que en una empresa los empleados pueden hacer cosas sin que se entere el jefe", ha dicho Romero, que ha añadido que este complemento salarial, del que "no tenía conocimiento", fue "una razón" por la que decidió el despido de Luque.

Respecto a la reducción de plantilla, el director del certamen también ha señalado que el Festival tenía "unas oficinas abiertas en Madrid por el anterior equipo directivo", e "inmediatamente", cuando él llegó al cargo, "se cerraron y su personal dejó de trabajar para el Festival".