Cerca de la mitad de los hogares disponía de una vivienda en propiedad sin hipoteca en el año 2010. Sin embargo, cuatro de cada diez unidades familiares debían restar de sus ingresos los gastos correspondientes a la hipoteca (un 32,3%) o al alquiler (9%).

En el primero de los casos, a los ingresos medios por persona de 811 euros mensuales (media nacional), debían restar los 541 correspondientes al pago de hipoteca. En el caso de los que se encontraban arrendados, los gastos relacionados con la vivienda –incluido el alquiler, agua, luz ,..– ascendieron a 652 euros de media. En los hogares con vivienda en propiedad ya pagada, estos gastos se reducen a 189 euros.

Otro dato curioso de la encuesta es quién toma las decisiones a la hora de abordar gastos en los hogares.

En relación con las compras diarias, en el 58% de los casos la decisión la toma la mujer, aunque en la franja de edad más joven (hasta 29 años), es la pareja. La situación cambia cuando se debe abordar el gasto de un bien de consumo duradero (muebles,..), ya que la decisión es conjunta en la mayor parte de los casos, independientemente de la edad.