El Ministerio de Empleo y Seguridad Social aprobó ayer el expediente de regulación de empleo (ERE) extintivo de Urende, que implica el despido de 592 trabajadores, con una indemnización de 20 días por año trabajado, y el cierre de 18 tiendas en toda España. Por contra, se mantendrán abiertas cuatro tiendas (tres de ellas en Andalucía) y 110 puestos de trabajo.
En el caso de Málaga, la medida afecta a 86 trabajadores de las dos tiendas de la provincia: 53 en el Centro Comercial Larios en la capital y 33 en Marbella. El establecimiento marbellí llevaba ya meses cerrado, con sus trabajadores acogidos a un ERTE temporal, mientras que en el caso de Málaga, la tienda ha seguido abierta, según explicaron fuentes sindicales. Los trabajadores tendrán una indemnización de 20 días por año trabajado que será abonada por el Fondo de Garantía Salarial (Fogasa).
A falta del visto bueno judicial. Tras la aprobación del ERE por la Administración laboral competente, ahora tendrá que ser la autoridad judicial la que le dé el visto bueno, en este caso el Juzgado de lo Mercantil de Córdoba, dado que Urende está en situación de concurso voluntario de acreedores, según añadieron otras fuentes sindicales.
Sin embargo, se da por hecho este último trámite, dado que el citado ERE fue propuesto por la empresa y aceptado por los trabajadores. En concreto, el 85,74% de los delegados que representan a los 702 empleados de las 22 tiendas que tiene Urende en España votaron y aceptaron el pasado enero, en una reunión celebrada en Córdoba, sede central de esta cadena de venta de electrodomésticos, el plan propuesto por la empresa, que conlleva el citado ERE.
La consecuencia es que la tienda de Urende Aeropuerto, en la capital cordobesa, otra en Granada, otra en Jaén y una más en Ciudad Real, son las cuatro que permanecerán abiertas de esta cadena de venta de electrodomésticos, perteneciente al Grupo Sánchez-Ramade y que arrastra una deuda de más de 200 millones de euros.
