La sexualidad sigue siendo un tema tabú para muchos y en cualquier caso forma parte de la esfera de lo íntimo. Asimismo es un buen medidor de la situación por la que atraviesa una pareja, ya que normalmente cuando existen desavenencias o problemas, éstos afectan directamente a la relación sexual.

Pero, ¿cuáles son los principales problemas de los malagueños en este campo? Las consultas mayoritarias de ellos se refieren a la disfunción eréctil y la estimulación precoz, pero son ellas sin embargo las que de forma mayoritaria acuden a un experto y lo hacen por un motivo fundamental: la falta de deseo y apetito sexual.

Así lo explica la sexóloga Ana Rosa Jurado en el marco de la celebración el próximo martes 14 de febrero del Día Europeo de la Salud Sexual. «Nos cuesta todavía trabajo acudir a un experto. El profesional debe ayudar y dar pie a que la persona pueda exponer su problema», indica.

La vergüenza o el temor hace que el afectado se autodiagnostique, se convenza o se conforme con esa situación y, muchas veces, hay problemas que se pueden solventar con un simple consejo, asegura.

La médico resalta que el ser humano es un ser sexuado, es una condición intrínseca, con la que se nace «al igual que tenemos pulmones para respirar». Otra cosa es la actitud que cada persona tome hacia su sexualidad. De hecho, un individuo que disfruta de su sexualidad «es psicológicamente sano, porque normalmente cuida más su cuerpo, ya que la salud sexual condiciona hábitos de vida para el resto de su salud», dice. «Estar satisfecho con tu sexualidad te hace incluso ser otra persona, eres más feliz, estás más relajado, más tranquilo, te relacionas mejor», comenta.

Ya cada cual establece sus formas, su frecuencia, sus límites y sus condiciones. ¿Es recomendable el sexo sin amor?, ¿es negativa la promiscuidad? ¿El hombre se mueve por impulsos fisiológicos y la mujer requiere de una implicación mental y emocional?

Hay muchos falsos mitos en la sexualidad del ser humano y en los comportamientos de la mujer y del hombre, aclara la experta. «Cada persona puede enfocarlo como quiera. Unos necesitan que haya amor y otros una simple amistad. Depende de los valores de cada persona y nadie debería entrar a juzgar modelos», considera.

El sexo es saludable, beneficia al ser humano física y mentalmente y es una cuestión muy presente, aunque continúe sin formar parte de las conversaciones cotidianas. «En la sexualidad no existen cifras, ni tamaños, ni frecuencias, ni nada. Es algo íntimo, de la pareja, de ambos», reseña.

La experta comenta que se ha hablado mucho del sexo desde un punto de vista negativo, en relación a los embarazos no deseados o al aumento de las enfermedades de transmisión sexual por una mayor promiscuidad o diversidad. Para la médico es muy importante cuando se habla de sexo respetar la variedad y la diversidad.

En cuanto al falso mito que persigue a los hombres y que lo alejan más de las emociones y lo sitúan en el placer corporal, la experta precisa que aunque los varones tienen esta etiqueta y unos roles sociales adquiridos que les impide en ocasiones darse cuenta de que pueden desarrollar otros patrones, todo depende de cada persona. En cierta forma les condiciona, pero hay que hablar de individuos y no de hombres o mujeres, concluye.