Los principales investigadores del caso Malaya confirmaron ayer que las anotaciones de pagos a miembros de la corporación municipal de Marbella correspondían en el tiempo con resoluciones favorables del Ayuntamiento a los empresarios que aportaban el dinero. Los policías, que declararon ayer como testigos en el juicio, explicaron cómo llegaron a la conclusión de quiénes recibían las cantidades de dinero, cuyas iniciales figuraban en varios archivos informáticos intervenidos en la sede de Maras Asesores, donde el presunto cerebro de la trama, Juan Antonio Roca, tenía un despacho.

En uno de los ficheros de contabilidad, denominado «ayuntamiento.xls», se hallaron un total de trece portadores y unas salidas de dinero anotadas junto a iniciales de receptores que se correspondían con integrantes de la junta de gobierno local. «Es como si tuviéramos las iniciales de los jugadores del Real Madrid y arriba pusiera Real Madrid», argumentó uno de los investigadores para justificar cómo dedujeron que se trataba de los ediles de Marbella.

Además, les ayudó en su tarea de identificación otro archivo en el que la secretaria de Roca reflejaba las llamadas que éste recibía y no atendía. Posteriormente, los policías se centraron en relacionar los pagos efectuados con las salidas de dinero, para lo que comprobaron si había resoluciones municipales favorables, siguiendo el criterio del ministerio fiscal y del juez instructor, según declararon. Así, pudieron constatar que no existía un reparto equitativo entre los destinatarios del dinero, y que la alcaldesa, Marisol Yagüe y los tenientes de alcalde Isabel García Marcos y Carlos Fernández -identificados por sus iniciales- tenían asignaciones de mayor cuantía.

En los archivos también figura la anotación de un pago de 9.715 euros de un responsable de la promotora Aifos que corresponde con la cantidad percibida por un cirujano plástico, el cual confirmó que había operado a Yagüe y que había cobrado el importe reflejado en la contabilidad de Roca. A preguntas del fiscal Anticorrupción, Juan Carlos López Caballero, de si este pago corresponde a una dádiva por parte de Roca, uno de los agentes señaló que «de otra manera no se puede entender» que éste tenga anotada dicha operación y el nombre del cirujano. Los agentes añadieron que veían cuestiones que «repudiaban a la lógica», como la permuta de aprovechamientos urbanísticos en la Milla de Oro por vertederos o edificios institucionales, y que atribuyen a pagos de empresarios a Roca.