El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, ha defendido la utilidad de los llamados opinómetros, instalados en centros municipales y juntas de distrito para conocer la opinión de los ciudadanos. A su juicio, es un mecanismo para que, "en un tiempo muerto" en un edificio público, el usuario pueda "tener interactividad y dejar escritas sus sugerencias".
"Esos aparatos son útiles como fórmula para facilitar el planteamiento de sugerencias o iniciativas por parte del ciudadano", ha señalado este martes a los periodistas De la Torre, quien ha incidido en que "todo lo que sea acercar la administración al ciudadano me parece bien".
Como ha afirmado, estos opinómetros, financiados a cargo del Fondo Estatal para el Empleo y la Sostenibilidad Local (Feels), "no son válidos como sistemas de recogida de opinión cerrados porque una encuesta es una encuesta y esto no lo es, pero sí para sugerir y facilitar el diálogo".
Estos aparatos, un total de 25, cuya inversión de 200.000 euros fue muy criticada, están inactivos desde el pasado 30 de junio "por un problema técnico de software", según De la Torre, quien ha subrayado, de todos modos, que "es una inversión que durará años".
