La Universidad de Málaga mostró ayer su firme rechazo a las reformas y recortes realizados por el Gobierno central y criticó también el Plan Económico-Financiero hecho público por el nuevo Ejecutivo andaluz esta semana.

El equipo de gobierno de la UMA, dirigido por Adelaida de la Calle, rechazó así, a través de un comunicado, el procedimiento llevado a cabo por el Gobierno al regular materias que afectan a las universidades, sin contar con su opinión, ni con la de los órganos y asociaciones que las representan. Además, dejó claro que no apoyará la propuesta de subida de precios públicos de las matrículas correspondientes a enseñanzas de Grado y Máster, por considerar que en época de crisis es injusto que los estudiantes tengan que hacer un mayor esfuerzo económico.

En cuanto a las medidas establecidas en el Real Decreto-Ley 20/2011 y en el Real Decreto-Ley 14/2012, la UMA considera que perjudican y deterioran el servicio público de la educación superior. También rechaza «las medidas restrictivas que afectan a la oferta de empleo público y a la contratación temporal de personal docente e investigador y de administración y servicios».

En cuanto al nuevo plan económico de la Junta, para el periodo 2012-2014, el equipo de De la Calle ve necesario un plan de ahorro para corregir el déficit público, pero subraya que «no se puede hacer perjudicando el estudio, la docencia y la investigación y recortando los salarios de los empleados públicos». No obstante, valora que se vaya a tener en cuenta la opinión de las universidades antes de aplicar las medidas.

El nuevo plan presupuestario de la Junta ha llevado a la UMA a suspender la aplicación del proceso de asignación docente que se había iniciado para el curso 2012/2013, a la espera de que se adopten las correspondientes reformas. Por último, además de destacar su autonomía en el ámbito de sus competencias, el gobierno de la UMA manifiesta su defensa a ultranza de la Universidad pública y su apuesta por mejorar la docencia y la investigación.