A. S. V., una joven malagueña de 29 años falleció ayer en El Chorro mientras practicaba escalada al caer desde una altura de unos 60 metros, mientras que su compañero, F. J. V. G. y de 24 años, tuvo que ser rescatado por la Guardia Civil después de quedarse colgado a la pared sin la cuerda con la que practicaban la escalada.

Según fuentes del sistema Emergencias 112 Andalucía a Europa Press, los hechos ocurrieron sobre las 11.30 horas en el paraje Los Frontales, cuando el joven alertó de que la persona con la que escalaba se había despeñado mientras descendían por una pared y que él había quedado atrapado en la pared. Fuentes del Consorcio Provincial de Bomberos de Málaga aseguraron después que el chico se encontraba «estable y en una zona más o menos segura». Allí estuvo hasta que fue a buscarle el Equipo de Rescate e Intervención en Montaña (EREIM) de la Guardia Civil, aunque al lugar de los hechos también se trasladaron efectivos del Infoca, servicios de Emergencias Sanitarios 061, Policía Local de Málaga y Protección Civil. Varios escaladores que se encontraban en la zona se pusieron a disposición de los efectivos para ayudar en el rescate. Mientras que los agentes de la benemérita se centraron en el rescate del joven, los bomberos hicieron lo propio con el cadáver, que quedó en una zona de difícil acceso.

Según pudo saber este periódico, la vía en la que ocurrió el accidente es conocida por tener varios largos, es decir, varios tramos y siendo el más pequeño de unos 15 metros de altura. Según las fuentes, esa vía está catalogada por los escaladores como una vía de aventura, lo que significa que, sin poseer un alto grado de dificultad, tampoco es una zona recomendable para principiantes.

Historial trágico. Una vez más, El Chorro acoge una tragedia que en la última década ha sumado cerca de una decena de víctimas mortales. La más sonada ocurrió en agosto del año 200, cuando tres jóvenes de 20, 21 y 23 años de edad perdieron la vida cuando practicaban tirolina en el Desfiladero de los Gaitanes. Seis años más tarde, en febrero de 2006, otro escalador de 30 años falleció en el hospital como consecuencia de las heridas que sufrió al despeñarse y ese mismo año otro hombre de 38 años perdió la vida en julio. Ya en 2010, un escalador de 24 años también perdía la vida, mientras que meses más tarde falleció otro que practicaba barranquismo. El pasado verano, un joven escalador de nacionalidad polaca desapareció en esta zona y varios días después fue encontrado su cadáver en la zona conocida como Cueva de la Palomas. UN amigo suyo dio el aviso. El pasado mes de marzo, un joven se fracturó el tobillos de la pierna derecha al caer desde cinco metros de altura mientras escalaba.