El sector turístico de Málaga y la Costa del Sol, que afronta el verano con una media de entre 65.000 y 70.000 trabajadores fijos y fijos discontinuos, tan sólo se reforzará este año con unos 3.000 empleados eventuales extra para afrontar los picos de actividad de la temporada, según las primeras previsiones del sindicato CCOO, que explica que la incertidumbre acerca del comportamiento del turista nacional y las dudas sobre si las cifras del visitante foráneo continuarán al alza mantienen unos criterios de máxima prudencia en el sector. Lejos quedan ya los tiempos previos a la crisis económica, donde cada verano suponía la entrada de hasta 10.000 trabajadores extra en cafeterías, restaurantes, chiringuitos y demás negocios relacionados con el turismo.

Según explica el secretario general de Comercio, Hostelería y Turismo, Gonzalo Fuentes, las bajas previsiones se hacen después de comprobar que el pasado verano de 2011, que fue excelente en estancias y pernoctaciones por el desvío a España de turistas que solían ir a Egipto o Túnez, no alcanzó ni siquiera los 4.000 empleos de volumen extra en Málaga.

«El pasado verano fue espectacular en cifras, en parte porque la primavera árabe trajo de rebote muchos turistas a España pero, sin embargo, eso no se tradujo en un incremento significativo del empleo. Por eso creemos que el verano de 2012 puede ser todavía más flojo», dice.

CCOO señala, como también hizo la semana pasada el consejero andaluz de Turismo y Comercio, Rafael Rodríguez, que la política de recortes del Gobierno, a la subida de impuestos y las rebajas salariales a colectivos de funcionarios en las autonomías son las «peores enemigas» de un sector basado precisamente en el dinero que las familias pueden destinar al ocio y a las vacaciones.

«El turismo es la industria del consumo pero si las clases medias siguen perdiendo poder adquisitivo es imposible que pueden seguir viajando. Y el turista nacional, que siempre es el que salva los muebles en la Costa del Sol, ya bajó el año pasado, por lo que no sabemos que es lo que puede ocurrir este verano», explica Fuentes. Esta incierta coyuntura tiene también su reflejo el peso del empleo a tiempo parcial, que ha aumentado de un 15% a un 30%. «Se están haciendo contratos por un máximo de cuatro horas diarias, aunque al final esa persona acaba trabajando el doble. La reforma laboral permite ya que trabajar a tiempo parcial y hacer horas extras ya no sea algo incompatible», apunta el responsable sindical.

Las oportunidades de Adecco. Por su parte, la empresa de trabajo temporal Adecco calculó ayer que la campaña de verano generará un total de 18.280 nuevos contratos de trabajo en Andalucía, una cifra que supone un aumento del 5% con respecto a los firmados durante los mismos meses del año pasado en la región andaluza. Del total de estas cifras, Málaga registrará cerca de 4.200 contratos, según Adecco. No obstante, hay que matizar que los sindicatos hablan de puestos y las ETT como Adecco de contratos. De esta forma, un mismo trabajador puede encadenar durante la campaña de verano varios contratos para un mismo puesto.

Esta ETT afirma que el verano traerá «nuevas oportunidades laborales» a nivel nacional, donde se estima que se generen 125.000 nuevos contratos entre los meses de junio y septiembre. En el caso de Andalucía, especialmente en zonas de costa, las actividades relacionadas con el sector servicios serán las que experimentarán una subida más notable de las contrataciones, en concreto en turismo, hostelería, aeropuertos, promociones y call center.

Cocineros, camareros o recepcionistas de hotel con idiomas serán los puestos más requeridos en los negocios de restauración y hoteles, mientras que los agentes de viaje, guías turísticos, animadores socioculturales y monitores de tiempo libre serán los trabajadores estrella del verano para las agencias de viaje, parques temáticos y centros de ocio. Dentro del sector servicios, el aeroportuario contratará en un número considerable a personal de facturación, mozos maleteros y recepcionistas de alquiler de coches, afirma Adecco.

Asimismo, los centros comerciales podrían reforzar plantilla ante el aumento del consumo y la necesidad de cubrir bajas de vacaciones. Así, promotores, cajeros, dependientes, reponedores, o montadores de cambio de imagen también serán reclamados.