El Juzgado de lo Penal número 4 de Málaga ha condenado a un técnico de Sevillana-Endesa por originar un incendio de 13,6 hectáreas, sin tener intención de ello, en una zona montañosa de la capital. El procesado ha sido sentenciado a seis meses de prisión por un delito de incendio forestal por imprudencia grave y al pago de una multa de 1.800 euros. Además, deberá indemnizar al Infoca en 6.000 euros y a un particular en más de 7.100 por los daños que sufrió su parcela.

A las 3.10 horas del 27 de agosto de 2007, en el paraje Cerro Santo Pitar, en Málaga, «se originó un incendio que afectó a una superficie de 13,6 hectáreas de zona forestal de monte (pastos y matorral), cuando una línea de baja tensión de titularidad de Sevillana-Endesa, y debido al deficiente mantenimiento de la línea, causó un cortocircuito», recoge el juez en el apartado de hechos probados de la sentencia.

El togado añade que cayeron sobre el pasto fino «partículas incandescentes, provocando su ignición y propagación a la vegetación colindante». El acusado, como responsable de mantenimiento de la mencionada línea, según informó la propia compañía, fue «el que contravino las más básicas y primarias normas de cautela, determinadas en el Decreto 247/2001, sobre prevención de incendios forestales de Andalucía», consta en la sentencia.

La fuerza actuante se personó rápidamente en el lugar, y el incendio fue extinguido a las 20.00 horas del mismo día. Como consecuencia del fuego, añade el togado en el apartado de hechos probados, se originaron gastos de extinción que ascienden a 6.007,74 euros.

El incendio afectó, además, a la parcela de un particular, en la que se originaron diversos daños en una superficie de 13,20 hectáreas. En concreto, se perdió pasto, bolinas y veinte colmenas. Los perjuicios sufridos por este vecino han sido tasados por los peritos en más de 7.100 euros, siempre según el tenor literal de la sentencia, en su apartado de hechos probados.

Debate probatorio. Desde el punto de vista probatorio, reconoce el juez Ricardo Puyol, «el debate se centró en determinar cuál fue la causa del siniestro, llegándose a la conclusión probatoria de que la causa altamente probable del siniestro fuera que, como consecuencia del defectuoso mantenimiento de una línea de baja tensión se causara un cortocircuito, cayendo las partículas incandescentes en pasto fino», lo que finalmente fue acogido por el togado en su sentencia, a la que tuvo acceso este periódico.

Testimonios. El policía instructor del atestado afirmó: «Fue un roce en la parte superior de la línea, saltan una partículas incandescentes a la base». Mientras que otro técnico de Endesa aclaró en el juicio oral: «La pérdida de aislamiento del cable se ha podido producir por el calor del cable. Cuando un cable de baja tensión pierde aislamiento y toca con algo, si el contacto es muy franco y el golpe, de intensidad, se puede producir una tensión permanente».

Este compañero del sentenciado afirmó que el responsable de conversar y mantener la torre era el acusado. La condena no es firme y contra la sentencia cabe recurso ante la Audiencia Provincial.