Imagine por un momento una vida distinta. En esta nueva vida usted invierte unas cuatro horas en trasladarse desde su casa hasta el supermercado. No puede garantizar que sus hijos asistan a clase diariamente porque en el trayecto tendrá que atravesar una docena de controles policiales. Su esfuerzo en el trabajo será recompensado con un sueldo ínfimo y para colmo, puede que esta noche varios agentes entren en su casa sin previo aviso y destrocen todo lo que encuentran a su paso. No es el guion de una película, esto desgraciadamente es la situación de los territorios palestinos.

Este conflicto, tan mediático como desconocido, afecta actualmente a los más de 4 millones de personas que habitan en los territorios palestinos. Ayudarles a construir una sociedad preparada fue el objetivo primordial que persiguen desde el año 2003 en Asecop, la asociación fundada en Málaga por el doctor Jehad S. Rashed, que ha conseguido en este tiempo fomentar a través de su delegación en Belén numerosos proyectos de desarrollo económico y cultural.

«Durante los tres primeros años nos dedicamos a proyectos de menor envergadura porque estábamos empezando pero a medida que trabajábamos más a fondo en la zona fuimos asumiendo más responsabilidades» explica el director de proyectos de Asecop, Jehad Suleiman. Aunque los palestinos cumplen religiosamente con los impuestos, la realidad es que no disfrutan de los mismos derechos que los israelíes y no tienen acceso a la sanidad ni a la escolarización libre.

Por ello, uno de los pilares fundamentales de Asecop es garantizar en la medida de lo posible el acceso a una cobertura sanitaria básica. Todos estos primeros proyectos ayudaron a desarrollar nuevas delegaciones en otras ciudades españolas, lo que permitió un mayor dinamismo entre los cooperantes. El técnico de proyectos, Diego Artero, incide también en la importancia que están teniendo las actividades centradas en fomentar la independencia de la mujer palestina. Por poner un ejemplo, Asecop ha puesto en marcha con la colaboración de asociaciones locales varios talleres textiles, cursos de formación profesional y guarderías que permiten a las mujeres sentirse realizadas también en el aspecto laboral.

También se han puesto en marcha talleres artesanales, cursos de turismo y hostelería, actividades destinadas a promover la participación social y política de las nuevas generaciones y varios centros de atención sanitaria de emergencia. En el año 2009, a través de la colaboración de la Junta de Andalucía, Asecop y la Unión de Comité de Asistencia Sanitaria (UHCC) consiguieron tres clínicas móviles que llegaron a la Franja de Gaza el día 2 de enero. Tres días más tarde, los bombardeos israelíes destruyeron y dejaron completamente inutilizados los vehículos. Resultado: La región más desprovista de atención sanitaria se quedaba sin su última esperanza para atender emergencias.

Afortunadamente esto no siempre ocurre y son muchas las semillas que han dado su fruto en la zona, consiguiendo fortalecer el tejido empresarial y social en este área.

El muro que separa los territorios palestinos de Israel se construye sin seguir ningún patrón y en muchas ocasiones, devora sin control todo lo que encuentra a su paso: Escuelas, ambulatorios, centros sociales, viviendas y separa a familias y comunidades completas. Compuesta en su mayoría por musulmanes y cristianos, la población palestina asiste atónita a un conflicto del que no puede liberarse. «El problema es que no hay Estado al que aferrarse, viven a expensas de los demás», explica Suleiman. «El simple hecho de ser conscientes de lo que ocurre a miles de kilómetros de Málaga ya es suficiente para ayudar a la población palestina», asegura Artero, quien cree que las movilizaciones sociales de los últimos años están evidenciando las simpatías que sienten los españoles por este pueblo.

«No podemos hablar de un conflicto religioso, la historia de Palestina está unida al laicismo y entre Gaza y Cisjordania hay una gran unidad y respeto entre las distintas religiones», concreta Suleiman. Exactamente la misma diversidad que existe entre el grupo profesional que forma Asecop, tanto en las delegaciones españolas como en las ubicadas en territorio palestino.

Hay muchas formas de colaborar con esta comunidad. A través del compromiso social, como se ha mencionado anteriormente, participando económicamente en la entidad o bien asistiendo a los múltiples actos culturales que organiza Asecop, tanto en Málaga como en otras capitales españolas. El objetivo de esta programación es acercar las costumbres y el folclore palestino a nuestro país. En esa lucha por fomentar la cultura hispano-palestina, Asecop convoca anualmente el premio literario Yasser Arafat, cuyo objetivo es dar a conocer la realidad de este pueblo olvidado.