Más de la mitad de los alumnos que se matriculan en los Programas de Cualificación Profesional Inicial (PCPI), una opción reservada a los alumnos más rezagados, a los que se les facilita una formación laboral que además les sirve para obtener el título de graduado ESO a través de esta vía, se reengancha a los estudios y se apunta después para hacer un ciclo formativo de Grado Medio o incluso el Bachillerato.

La Consejería de Educación de la Junta de Andalucía destacó ayer a través de un comunicado que los PCPI no sólo logran rescatar del fracaso escolar a los estudiantes con mayores dificultades, que son los que recalan en estos programas, sino que están consiguiendo combatir también el abandono educativo temprano animando a los jóvenes a proseguir estudios posobligatorios.

Así se desprende de los datos correspondientes al curso 2011/2012, en el que 3.584 jóvenes andaluces obtuvieron el título de ESO tras cursar el segundo curso de los PCPI. Entre esos jóvenes que lograron sortear el fracaso escolar, 2.106 alumnos decidieron proseguir su formación, lo que representa un 59%. La mayoría de ellos, 1.917, optó por enseñanzas de FP de Grado Medio (91.03%), mientras que 189 se matricularon en primero de Bachillerato.

Destinado a estudiantes con mayores dificultades, abocados en muchas ocasiones a abandonar sus estudios o a finalizar la etapa obligatoria sin la titulación básica, los PCPI están estructurados en dos cursos. El primero de ellos facilita al alumnado una capacitación profesional, mientras que el segundo permite obtener la titulación en Educación Secundaria Obligatoria.

Este curso escolar hay más de 15.000 alumnos en los 600 programas de cualificación que se imparten en Andalucía -algo más de 2.900 estudian en la provincia de Málaga- que la reforma educativa del Gobierno central tiene previsto eliminar. La Junta de Andalucía está en contra de su supresión.

El proyecto de la nueva Ley de Mejora de la Calidad de la Enseñanza (LOMCE) cambia bastante el panorama. Convierte los PCPI en enseñanzas terminales puesto que elimina la posibilidad de que los alumnos que los cursan obtengan el título de graduado en Secundaria. Dejarán, por tanto, de actuar de anzuelo para rescatar a estos alumnos que no tenían nada.

La reforma contempla que los ciclos de Formación Profesional básica sustituyan a los actuales PCPI para los alumnos con dificultades a partir de los 15 años. Serán de dos años completos y considerados como educación básica, obligatoria y gratuita.