La Fiscalía de Málaga ha archivado la denuncia del Ayuntamiento de Málaga contra un grupo de 34 policías locales al considerar que no hay indicio de infracción penal cuando estos agentes abuchearon a concejales del equipo de gobierno la noche del encendido de las luces de Navidad de diciembre pasado.

La Fiscalía señala que no ve indicios de comportamiento ilícito en la actitud de los agentes, desestima la denuncia y devuelve el escrito de acusación al Ayuntamiento.

El Consistorio había ordenado una investigación interna tras los incidentes ocurridos el día del encendido de las luces de Navidad, el 30 de noviembre.

El informe acusaba a los agentes como presuntos responsables de una «infracción penal» por su participación en los actos de protesta tras el encendido de las luces de Navidad, «persiguiendo e increpando» a varios concejales que, según su propio testimonio, «se sintieron coaccionados, intimidados y de alguna manera vejados, limitando su libertad».

La investigación interna dio lugar a la apertura de un expediente disciplinario a los 34 agentes que fueron identificados en la protesta. Nada más abrirse el expediente, el instructor del mismo, decidió, de acuerdo con los responsables del área de Seguridad, remitir a la Fiscalía el escrito sobre la información reservada al entender que en el mismo se señalaba la posible comisión de «infracciones penales» .

Ahora el Ayuntamiento deberá optar por proseguir los expedientes por la vía administrativa disciplinaria o archivar definitivamente los mismos.

Días después de enviar esta denuncia a la Fiscalía, el Ayuntamiento decidió enviar también una segunda denuncia sobre los incidentes ocurridos en la sede del Ayuntamiento durante la celebración de un pleno municipal cuando un grupo de policías que protestaban en la calle logró penetrar en la planta baja del edificio y montar un alboroto hasta que fueron expulsados por su compañeros de uniforme.

Concejales «vejados e intimidados». El informe reservado determinaba que había «tres niveles de reponsabilidades». La de quienes simplemente estuvieron presentes «amparando con su presencia» el desarrollo de los acontecimientos; la de quienes «se destacaron de manera especial en la increpación a los concejales», que forman el grupo más numerososo y, en tercer lugar, la de quienes «persiguieron al teniente de alcalde Damián Caneda, en cuanto afectaron en mayor medida a su dignidad personal y libertad de movimientos».

El informe hace mención especial a que la presencia de policías locales «persiguiendo e increpando

a autoridades municipales, a las que se debe el respeto y tratamiento recogido reglamentariamente,

resulta a todas luces demoledor para la imagen y consideración que un cuerpo centenario como el de la Policía Local de Málaga merece y por lo tanto supone un descrédito para esta institución policial». La identificación de las personas asistentes sólo pudo ser posible gracias a «las abundantes imágenes publicadas por los medios de comunicación», ya que el informe del oficial que dirigía el GOA de la Policía Local «no identifica a ninguna de las personas presentes».