El Museo Automovilístico de Málaga inicia el nuevo curso expositivo con Trilogy, una muestra única en la que queda reflejada la estrecha relación entre las grandes personalidades de la moda, sus vestidos y las firmas de automóviles.

Un estrecho vínculo entre marcas como Chanel y Mercedes, Dior y Ferrari, Balenciaga e Hispano, Schiaparelli y Bugatti o Nina Ricci y Lancia. Los amantes de la moda y el automóvil podrán disfrutar de más de 40 temas que constituyen un desfile de marcas y estilos juntos como Mercedes, Maserati o Cord con Valentino o John Galliano: un inédito encuentro entre gente de la moda y estetas del automóvil. Una original reunión de artistas y celebridades donde aparecen iconos internacionales como Andy Warhol, Gucci y Prada entre otros muchos.

La familia del malagueño más internacional también está representada en esta nueva exposición con Paloma Picasso, de quien se puede ver un clutch diseñado por ella junto a un bolero de Yves St. Laurent, con quien trabajó en más de una ocasión en la década de los setenta. Este concepto de moda, diseño y grandes personalidades se ve claramente en la relación entre Schiaparelli, Dalí y Bugatti. Schiaparelli, de quien se expone su capa de plumas de gallo, fue la primera estilista en ver en las obras de Dalí una forma de hacer moda. Por ello, junto a la obra de la diseñadora, puede verse un sombrero-zapato surrealista dibujado por el propio Dalí.

En está inédita exposición se puede contemplar una pieza exclusiva inspirada en el más puro estilo warholiano: un vestido cuyo diseño está basado en el famoso Campbell Soup -las populares latas de sopa-, representando así al máximo exponente del arte pop. Y como los vestidos son elementos clave, la muestra no olvida a su protagonista principal: la mujer. En su homenaje tenemos algo que nos conduce directamente a ellas: Sublime Collection, una importante colección de vestidos vintage que recorre la evolución de la alta costura desde los años del Charleston hasta nuestros días, pasando por los 50 y la década prodigiosa, con magníficos ejemplos como el esplendoroso vestido de Givenchy que durante los 90 fue la imagen de Naomi Campbell.

La necesidad de hacer llegar este importante triple nexo hace que en Trilogy cuente con obras como El Crash, un panel hecho con restos de coche que representa el accidente del que fue víctima el representante del expresionismo abstracto Jackson Pollock, que conducia un Cadillac descapotable. Trilogy cuenta además con tejidos exclusivos dibujados por pintores como el fauvista Dufy para Paul Poiret sobre el tema chassepersane (dibujo que aparece en Vogue Francia en septiembre de 1921), entre otras maravillas de la moda y la automoción.