Las condiciones de salubridad en La Cónsula, sin servicio de limpieza desde el pasado mes de diciembre, cuando fueron despedidas siete trabajadoras de la empresa Clece, con concesión municipal, han obligado a la Junta de Andalucía a tomar cartas en el asunto y ha dispuesto un retén de emergencia, aunque permanente, para que se encargue de estas labores. Iniciaron su actividad este martes, a pesar de que este centro se encuentra en un limbo administrativo.

El delegado del Gobierno de la Junta en Málaga, José Luis Ruiz Espejo, explicó ayer que aunque aún no se ha producido el tránsito hacia el nuevo modelo de gestión que hará viables y sostenibles en el futuro estos centros, la Junta prefirió en su día iniciar el curso para garantizar la formación de este alumnado, «aunque la situación de la escuela no sea la más idónea», incluyendo un servicio de limpieza que no existía. En vista de ello, «y como el Ayuntamiento no contrataba a nadie para limpiar su propio edificio», la Junta ha dispuesto este retén de limpieza.