El metro de Málaga volverá en 2016 a la fase de obras de importancia. Tras la inauguración el 31 de julio de 2014, la extensión de las líneas ha estado avanzando con el diseño del nuevo trazado y resolviendo los problemas de financiación del tramo Renfe-Guadalmedina, pero las obras se habían quedado reducidas a la mínima expresión desde 2013, cuando se completaron los túneles y se acometieron las instalaciones.

La vuelta de las máquinas-pantalladoras a la ciudad, que permiten construir la estructura del túnel, será una realidad tras la fiesta de Reyes. A partir de ese momento se acometerá la compleja excavación de los muros del túnel en la Alameda. Se iniciarán los trabajos en el lateral sur, más cercano al carril central de circulación, con idea de limitar el impacto en los comercios de la zona.

Esta primera mitad del año será de trabajo intenso en la Alameda, pero también en el puente de Tetuán. A lo largo de enero comenzará a desmontarse el tablero norte del puente, una vez terminado el desvío de canalizaciones y líneas de comunicaciones que discurren bajo el cauce.

Desmontar el puente de Tetuán. Serán dos meses de trabajo para desmontar parte de la estructura del puente, de forma que para marzo, una vez «adelgazado» (sólo se mantendrá el tablero pegado a la antigua sede de Correos para permitir el paso de tráfico), se iniciará la construcción del túnel.

Estas labores bajo el cauce serán de unos seis meses, en los que se trabajará por tramos. Se construirá una elevación en el lecho del cauce, en la mitad más cercana a Hacienda, sobre la que se instalará la máquina pantalladora para trabajar en el túnel, protegida por esa elevación de posibles desagües de la presa. Una vez terminada esa parte, se hará lo propio en la otra mitad del cauce, asegurando así un paso libre para el agua.

La idea es que para finales de verano se pueda iniciar la reconstrucción del puente tras hacer la primera fase del túnel, que permite excavar y continuar la obra bajo tierra. Serán seis meses para volver a instalar el tablero del puente, lo que sumará un año de trabajo en esta parte del trazado.

Trabajos en la Alameda. La construcción del túnel bajo la Alameda se iniciará en enero construyendo las pantallas que delimitan la galería y que se unirán mediante una bóveda. Avanzarán de forma paralela al trabajo en el puente, aunque dispondrá de dos máquinas-pantalladoras dedicadas a esta labor para acelerar los plazos, ya que incluyen la estructura subterránea de la estación Atarazanas, situada en la Alameda entre las calles Torregorda y Puerta del Mar.

En agosto se espera disponer de la estructura básica terminada y para marzo del año próximo se podría recuperar el paso de personas por gran parte del trazado. Poco más de catorce meses de ocupación de la superficie prevista. No volverán los vehículos al lateral norte de la Alameda, que está previsto que se peatonalice.

La excavación del túnel, trabajando ya bajo tierra y sólo con una rampa de salida de los camiones, se podrá acometer a finales de año. Esta fase de los trabajos es delicada, ya que se corre el riesgo de encontrar algún resto arqueológico que pueda retrasar la obra. En concreto no se espera localizar demasiado, quizá algún resto del antiguo fuerte de San Lorenzo o algún barco hundido, ya que la Alameda es terreno ganado al mar sobre el antiguo puerto de la ciudad.

De no haber interrupciones, a finales de verano de 2017 se podría disponer de los 298 metros de galería del tramo Guadalmedina-Atarazanas excavados y se empezaría a habilitar el interior para acoger las vías, catenarias y la estación, siempre con la mirada puesta para la inauguración en mayo de 2018.

Estos trabajos recuperan la actividad en la red de metro, centrada durante los dos últimos años en poner en marcha la primera fase del trazado, asegurando que funcionase bien el servicio, y en redefinir el trazado, acortando el tramo hacia La Malagueta, con la alternativa de continuar en superficie hasta el Hospital Civil.

Pero los trabajos en la Alameda no serán los únicos. Una de las prioridades del primer cuatrimestre de 2016 es retomar las obras en la avenida de Andalucía. Estos trabajos se pararon al 80% por diferencias en el presupuesto entre la constructora Ortiz y la Consejería de Fomento. Para febrero debe estar terminado el nuevo proyecto de ejecución de este tramo, que recoja los trabajos que faltan por conectar la red de metro en servicio -que llegan a Renfe- con el tramo de la Alameda y el enlace al Civil.

Estos trabajos podrán salir de nuevo a contratación en marzo y su adjudicación se finalizaría en primavera, de forma que se retome la construcción del tramo en verano, coincidiendo con el inicio de la fase más importante de construcción en la Alameda. Su plazo rondará los 21 meses, de modo que llegará justo para cumplir el último plazo de inauguración de la Junta de Andalucía.

Sobre el futuro del tramo hacia el Hospital Civil, su situación ahora es incierta ante la negativa vecinal y las dudas municipales sobre su tramitación y ejecución, quedando en el aire los pasos a ejecutar.