El 6 de febrero. Es la fecha clave para conocer cómo queda definitivamente la estructura territorial de Ciudadanos en Andalucía y, en consecuencia, también para despejar todas las incertidumbres que rodean el futuro de la formación a corto y medio plazo en la provincia de Málaga. El presidente de Ciudadanos en Andalucía, Juan Marín, dará a conocer los nombres de los encargados de coordinar el trabajo de la formación en las diferentes provincias. De esta manera, Marín pondrá fin de a especulaciones y aspiraciones. De entrada, esta nueva reestructuración que pretende asentar a la formación, después de la vorágine electoral, viene acompañada de una decisión de suma importancia para la formación en la provincia de Málaga. La de no seguir contando con Carlos Hernández White como secretario territorial.

La cúpula del partido rompe así con quien fuera la máxima autoridad del partido en la provincia. Según fuentes del partido, la decisión se ha tomado después de una intensa semana de reuniones y negociaciones a puerta cerrada en Sevilla, con sendos encuentros entre Marín y el coordinador territorial de Ciudadanos para Andalucía, Manuel Buzón, y con el fin de despejar definitivamente el horizonte.

En el nuevo rumbo político que tomará la formación naranja a partir de la fecha señalada, la estructura del partido estará encabezada a nivel regional por un Comité Territorial integrado por el propio Marín y Buzón, a los que habría que sumar los ocho coordinadores de cada provincia. Estos coordinadores saldrán, a su vez, de las votaciones que se están realizando en estos momentos en las agrupaciones de cada provincia. El órgano resultante dirigirá todas las políticas y estrategias del partido y estará bajo supervisión del Comité Ejecutivo Nacional. Además de la estructura orgánica, también se dará a conocer una nueva estructura institucional que, según fuentes de Ciudadanos, pretende asentar el partido y evitar en un futuro próximo que pueda descomponerse como pasó con UPyD.

Estructura en la provincia. Según la información a la que ha podido tener acceso este periódico, el organigrama de Ciudadanos en la provincia estará presidido por dos cargos nuevos: el de subdelegado orgánico y el de subdelegado político, que viene a sustituir la figura del antiguo subdelegado territorial. El subdelegado político ejercerá a su vez de portavoz provincial del partido, y será quien más peso y visibilidad tendrá dentro de la formación. Todo lo contrario, la figura del subdelegado orgánico será un trabajo más en la sombra y precisaría de un perfil técnico que coordine el engranaje interno.

Aunque los cargos aún no están designados, fuentes del partido señalan que se está barajando a un grupo reducido de militantes conocidos en la provincia. Según las fuentes consultadas, el nombre que más peso gana para ocupar el cargo de secretario orgánico es el de Julio Bergaño, que se recuperaría así para un puesto importante. Por otro lado, uno de los candidatos mejor situados para desempeñar el cargo de subdelegado político sería Guillermo Díaz. Actualmente trabajando como técnico en la Diputación, fue uno de los principales impulsores de Ciudadanos en Málaga.