El alcalde señaló ayer que no tiene referencia alguna de la reacción de las empresas privadas en el conflicto de la huelga de Limasa. De la Torre deja fuera a Fomento de Construcciones y Contrata (FCC), Urbaser y Sando en virtud del acuerdo alcanzado en su momento, en 2005, y pese a que estas empresas tienen el 51 por ciento de la sociedad.

De la Torre explicó que la reacción de los privados «no es un tema que me importe porque nosotros, para bien o para mal, tenemos un acuerdo societario, que obliga a ambas partes y que estipula que la política en materia salarial y de convenio la marca el Ayuntamiento, a cambio de eso hemos garantizado el 2% de beneficio a los privados», si bien recordó que vienen renunciando a ese beneficio en los últimos tres años y que lo harán también en 2016. Según el alcalde, «esto nos da una libertad y autonomía plena y total y también una responsabilidad. Por tanto, en esta materia podemos decir que es como si la empresa fuese municipal».

De la Torre fue más explícito al añadir a continuación que ellos no tienen nada que decir en este conflicto «Ellos dicen, ¿usted me garantiza ese 2%?, pues hagan lo que quieran; gobiernen la empresa como si fuera municipal, y eso venimos haciendo y por eso tenemos que decidir con la responsabilidad que dan los recursos públicos limitados».