­Los sindicatos UGT y CCOO de Málaga denunciaron ayer las condiciones de «gran precariedad» y «explotación» que se dan en el actual mercado de trabajo, caracterizado también a su juicio por un predominio de los «bajos salarios», e hicieron un llamamiento a la población a secundar la manifestación que realizarán hoy viernes con motivo de la Jornada Mundial por el Trabajo Decente.

Las centrales sindicales recordaron que en la provincia, según los datos ofrecidos en su día por el Ministerio de Hacienda, casi el 45% de los trabajadores perciben ingresos inferiores al Salario Mínimo Interprofesional (SMI), un porcentaje que supera en diez puntos al que se registraba en 2008, y añadieron que la pérdida de poder adquisitivo supera el 15% en relación a antes de la crisis. Con respecto a la precariedad, la secretaria general de UGT en Málaga, Auxiliadora Jiménez, y su homólogo de CCOO, Antonio Herrera, apuntaron que cerca del 95% de los contratos que se firman cada mes en la provincia son temporales y que, en el caso de los suscritos por circunstancias de la producción, dos tercios (un 67%) tuvieron una duración inferior al mes, una tasa once puntos por encima de la que se manejaba antes de la recesión. Un porcentaje que se eleva al 88% si se incluyen todos los que fueron inferiores a los tres meses.

Por otro lado, el 45% de los contratos firmados este año han sido a tiempo parcial, una modalidad que viene creciendo en los últimos tiempos en detrimento de la jornada completa. «Hay miles de trabajadores atrapados en un círculo vicioso de ocupaciones de baja productividad y bajos salarios, de un futuro incierto que no sólo tiene relación con el aumento de la desigualdad y la pobreza, sino que condiciona las expectativas de futuro del conjunto del país», comentó Jiménez.

Endurecimiento y miedo. «Tener un empleo no significa ya, desgraciadamente, salir de la pobreza, esa en la que se encuentran en estos momentos casi un 36% de los andaluces y andaluzas», añadió la responsable de UGT. Por su parte, Herrera afirmó que los trabajadores se ven abocados a aceptar condiciones tan precarias debido a la necesidad de «mantener un sustento», algo que aprovecha el sistema para imponer «la explotación y la desigualdad».

«El endurecimiento de las condiciones laborales es evidente y visible en todos los ámbitos de la vida laboral, desde la salud y la seguridad en el trabajo -sigue aumentando la siniestralidad en esta mezcla perversa de explotación y miedo- hasta el aumento de la jornada laboral -por supuesto sin remunerar- o la desigualdad de género», apuntaron.

La manifestación por la Jornada Mundial por el Trabajo Decente, que se convoca bajo el lema «Alto a la Codicia Corporativa. No a los contratos basura, los bajos salarios y la precariedad», saldrá hoy viernes de la Alameda de Colón a las 19.00 horas y finalizará en la plaza de la Marina.