­La consejera de Educación, Adelaida de la Calle, acusó ayer al PP de estar interesado en el «pim pam pum» más que en la educación andaluza, mientras que el partido de Juanma Moreno señaló al Gobierno andaluz, a sus políticas y a su gestión, como «único y último responsable» de los resultados del PISA de 2015, que sitúan a Andalucía última en ciencias y penúltima en lectura y matemáticas, por debajo de la media.

Durante la sesión de control al Gobierno andaluz, la diputada popular Marifán Carazo afirmó que este informe fue «un nuevo chasco para todos los andaluces» porque «mientras otras comunidades mejoran, Andalucía empeora y se sitúa a la cola» al retroceder en dos de las tres competencias la evaluación. Así, censuró los argumentos que ha usado la Junta para justificar este resultado, «primero decir que esto es culpa de la Lomce, aprovechando para culpar al PP; después culpando al analfabetismo de la Transición, que hay que tener valor para hacerlo; y también criticando la metodología de la prueba».

Por su parte, De la Calle afirmó que la Junta tendrá en cuenta los resultados del informe PISA «así como todos los indicadores que aporten elementos», si bien dejando claro que el examen se basa en criterios «mejorables». La consejera acusó al PP de estar más interesado «en las declaraciones, las contradicciones» que en la educación. «Lo importante es hacer un análisis equilibrado y justo y, a partir de ahí, buscar las soluciones», reseñó.