La presión ha surtido efecto. Unido a la polémica generada en los medios de comunicación. La empresa de catering Mendoza y Palomo, una de las más importantes del sector y que sirve más menús escolares en la provincia de Málaga, ha tomado la decisión de retirar el panga y la tilapia de sus platos, atendiendo así a las reclamaciones de las familias de cinco colegios de Torre del Mar, que se habían unido para hacer más fuerza en esta cruzada contra estos pescados exóticos tan polémicos.

Lo han conseguido. Carolina Espejo, la madre que, como adelantó La Opinión de Málaga había iniciado la recogida de firmas en la plataforma Change.org (ya supera los 9.740 apoyos) muestra su satisfacción e insiste en que los padres dudan de los valores nutricionales de estas especies, «aunque cumplan con todos los requisitos sanitarios». Sin olvidar, como es lógico, los informes de la OCU, que en su día apuntaron a la presencia de restos de pesticidas y mercurio en los ríos de Vietnam donde se cría el panga.

Pescados autorizados

La Junta de Andalucía, de hecho, siempre se ha escudado en que son productos autorizados. También lo hacía la propia empresa de catering antes de tomar la decisión de suprimirlos de sus menús. «En el mes de febrero ya no aparecerán y se acabará así la polémica», destacó Daniel Padial, director de Mendoza y Palomo, tras atender la petición de las familias.

El uso del panga y la tilapia se hizo muy popular en España por culpa de la crisis, ya que son pescados muy baratos. El consumo en los comedores también se ha extendido, sin que los padres lo entienda. Por ello, reclaman más pescados autóctonos en los menús, como la rosada o la merluza, y más comunes a cualquier dieta. Sobre todo en tierra de pescadores.

Espejo explica que tras la recogida de firmas en Change.org, los padres de cinco colegios de Torre del Mar (Antonio Checa, Vicente Aleixandre, Blas Infante, Genaro Rincón y César Augusto Bellido) a los que la misma empresa sirve el menú escolar a unos 500 estudiantes cada día, se habían unido para solicitar a la Delegación de Educación y a la propia compañía de catering la retirada de estos productos. «Íbamos a empezar una recogida de firmas por la vía legal, recogiendo nombres, apellidos y DNI de todos los que nos mostraran su apoyo», reconoce Espejo.

Educación siempre ha esgrimido que tanto el panga como la tilapia «pasan todos los controles de seguridad y calidad alimentaria y no hay ningún dato que avale la necesidad de retirarlos de su consumo». Además, justificaba su consumo en que se trata de pescados blancos que apenas tienen espinas, por lo que su ingesta no revestía ningún riesgo para los menores. No obstante, también advertía de que «los centros educativos pueden acordar con las empresas que prestan el servicio detalles que contribuyan a mejorar los menús que se sirven en los comendores escolares».

Según Daniel Padial, director de Mendoza y Palomo, «nosotros estamos con la razón de nuestro lado, ya que son especies autorizadas por la Consejería de Salud y estamos en el derecho de servirlas». No obstante, para evitar más polémicas, la empresa va a retirar estos pescados de la dieta y los va a sustituir, a partir de este mismo mes de febrero, por otros pescados blancos o azules.

Otras empresas de catering que trabajan en colegios andaluces ya había decidido suprimir estos productos de sus platos, atendiendo así a las reivindicaciones de las familias, que desconfían de la ingesta de estos pescados de procedencia vietnamita y africana y que los dietistas recomienda limitar su consumo.