La Asociación de Vecinos Parque Teatinos presentó ayer una denuncia dirigida a la Gerencia de Urbanismo en la que reclama medidas para «el restablecimiento del orden jurídico perturbado» y «la reposición de la realidad física alterada» en las caballerizas de los cocheros de caballos, en la calle Mesonero Romanos del barrio, ante la posibilidad de que existan obras «clandestinas» o bien «ilegales».

En concreto, la denuncia precisa que los vecinos «vienen detectando construcciones de obra como habitaciones y casetas de cierta entidad constructiva, de las que podría derivarse la incoación de un procedimiento para la restauración de la legalidad urbanística vulnerada».

El escrito, informó a La Opinión Miguel Millán, presidente de la asociación de vecinos, se presenta después de la reunión del pasado día 18 entre el alcalde y una comisión de cocheros, en la que se ha abierto la puerta a nuevos emplazamientos para las caballerizas, pese a que hace dos semanas la comisión de Urbanismo aprobó el traslado de las cuadras de Teatinos al polígono Guadalhorce.

Miguel Millán consideró «nefasto» el que esta incertidumbre pueda suponer que se retrase el traslado de las caballerizas, «que los vecinos de Teatinos llevamos pidiendo desde hace 17 años y viendo que esto se está ralentizando, me han pedido que actúe rápidamente».

Por otro lado, también criticó el que en las reuniones entre el Ayuntamiento y los representantes de los cocheros, «nunca nos llaman a nosotros, los vecinos de Teatinos, cuando somos la parte más afectada, eso es algo que no entendemos».

Por este motivo, Miguel Millán pidió ayer una cita con Francisco de la Torre, «ya que no nos invita a ninguna reunión». La reunión tendrá lugar el próximo lunes.

El presidente vecinal recordó que la asociación ya denunció en los medios en 2012 la construcción «en un fin de semana» de alguna de estas casetas y calificó de «calvario», la situación de los vecinos, porque las cuadras están «a 50 metros» de los bloques de Mesonero Romanos.

«El olor es insoportable, la cuba para el estiércol se puede quedar sin retirar una semana y hemos tenido caballos muertos cubiertos con una lona cuatro o cinco días», resumió.

«Nos negamos rotundamente»

Miguel Millán se opuso a que las cuadras permanezcan en su emplazamiento actual, aunque sea en instalaciones mejoradas. «Los vecinos nos negamos rotundamente, la ciudad ha crecido y aquí no pueden estar», subrayó.

A su juicio, si hay reticencias por parte de los cocheros para que las nuevas caballerizas vayan al polígono Guadalhorce, por la distancia excesiva, los mosquitos y porque es una zona inundable, apoyó la idea, lanzada en la comisión de Urbanismo de que se estudie instalarlas en terrenos del puerto. «Es la mejor opción, estarían lejos de las viviendas y la distancia se acortaría a la mitad. Pero la decisión que se tome, que no retrase el traslado», pidió.

En cualquier caso, criticó que las instalaciones municipales planteadas en el polígono Guadalhorce tengan un coste de 2,5 millones de euros. «Van a hacer un hotel de cinco estrellas, cuando por ese dinero se puede construir un albergue para las personas que duermen en la calle y que no caben en el albergue de Donoso Cortés».