­El parque de vehículos de la provincia de Málaga suma una media que supera los diez años de edad, según las cifras disponibles en la web de la Dirección General de Tráfico (DGT) extraídas sobre vehículos con menos de veinticinco años de antigüedad. Estos datos, cerrados a finales de 2015, contabilizan un parque total que ascendería a 1.194.727 vehículos frente a un censo de 873.561 conductores. La mayoría, 758.659 (64%), son turismos cuya media alcanzaría los 9,9 años de antigüedad, mientras que las motocicletas, el segundo tipo de vehículo más numeroso con 135.930 unidades (11%), acumula 8,7 años de media.

Los que más años suman, sin embargo, son los ciclomotores. El informe contabiliza 114.329 vehículos de este tipo con 11,6 años de media). Las 83.302 furgonetas (7%) censadas, por su parte, sumaban una media de 11,5 años y los camiones (84.887) 10,9. Por municipios, Málaga capital sumaba entonces 392.359 vehículos con una media (10,3 años) superior a la provincial y donde la edad de los ciclomotores ascendía a los 12,3 años de media, mientras que los turismos se mantienen en algo más de una década de antigüedad. En Marbella, donde el parque acumula la misma edad, destacan los 11,8 años de media de los ciclomotores o los 11,3 de los camiones, mientras que en Vélez Málaga los ciclomotores se disparan a los 12,3 años.

La vida del vehículo

¿Pasa más tiempo en el taller que en la calle? ¿Le cuesta arrancar? ¿Expulsa humo negro? Según el Real Automóvil Club de España (RACE), en la vida útil de un vehículo influyen muchos factores que ayudan a reducir o alargar su durabilidad. Los principales son el mantenimiento preventivo y correctivo, el uso y forma de conducción y el clima, por lo que es evidente que un vehículo durará más si pasa todas las revisiones que estipula el fabricante y si se utiliza correctamente. En este sentido, desde RACE explican que las condiciones de fabricación obligan a que los vehículos tengan una vida útil mínima y máxima que puede variar en función de las marcas y modelos. «Estos estándares de calidad para el motor rondarían, en general, un mínimo de 150.000 kilómetros y una duración media entorno a los 250.000 kilómetros dependiendo del uso y del mantenimiento», aseguran antes de recordar que, según los datos de la Dirección General de Tráfico, la antigüedad media de los turismos implicados en accidentes con víctimas el año pasado se situó en los 14 años: «La DGT alerta que el riesgo de muerte se duplica cuando circulamos en un vehículo de más de 7 años y se triplica cuando tiene entre 10 y 14 años».

Para la institución, hay una serie de síntomas con los que cualquier conductor debería plantearse cambiar de vehículo: ruidos extraños en el motor, tanto al arrancar como en marcha; la temperatura del motor no se mantiene estable; vibraciones en el volante, en los pedales, en la transmisión; las pérdidas de fluidos o sudoraciones por juntas y manguitos son cada vez más frecuentes; o sufre pequeñas averías pero muy continuas, entre otros síntomas. De la misma manera, RACE recuerda la importancia de un buen mantenimiento durante el verano, cuando los vehículos hacen muchos kilómetros en condiciones de temperaturas extremas. Por ello, la revisión de los líquidos (limpiaparabrisas, frenos, refrigerante, aceite) es importantísima a esta altura del año, al igual que revisar el estado de las baterías, las suspensiones y, por supuesto, los neumáticos.