­La campaña para combatir la gripe comenzó este lunes en Málaga y un total de 191 puntos repartidos por toda la provincia cuentan con vacunas disponibles, en total 214.000 dosis, para un virus que este año se prevé que tenga una incidencia moderada.

Tras un año con una de las incidencias más baja que se recuerda, las previsiones de cara a esta temporada son similares, según informó ayer la jefa de Servicio de Salud Pública de la Delegación, Yolanda González. Un pronóstico que surge tras ver el comportamiento del virus en el otro hemisferio y las condiciones climatológicas que acompañan en este primer mes de otoño, similares a las que se dieron durante el otoño del año 2016. Una temporada que comenzó con picos señalados y se relentizó hasta la última quincena de enero, cuando se observó un nuevo repunte del virus. A pesar de ello, la incidencia fue muy baja, según puntualizó Yolanda González.

La campaña de esta temporada estará activa hasta finales de diciembre y contempla dos cepas contra la gripe A y una contra la tipo B. Los mayores de 65 años, enfermos crónicos, embarazadas o personal que trabaja con personas de riesgo de sufrir la gripe, como los sanitarios, son los principales grupos a los que van dirigida esta campaña, una cita anual fija que tiene como objetivo prevenir y evitar la transmisión del virus.

La delegada de Igualdad, Salud y Políticas Sociales, Ana Isabel González, explicó durante la presentación de la campaña, en el centro de salud de la Trinidad, que el año pasado se pusieron hasta 198.000 dosis, de las cuales 130.000 fueron dirigidas a la población mayor de 65 años.

Los interesados en vacunarse pueden pedir cita a través de la página web de InterSAS, la aplicación Salud Responde, que enviará una notificación a modo de recordatorio, los centros de salud y a través del servicio de teleasistencia. Las personas que acudan a centros de día o estén en residencia también serán vacunadas de neumococo, según indicó la delegada de Salud, además de la gripe. Una medida para proteger frente a una de las principales bacterias productoras de neumonía, así como de otras infecciones, como la sinusitis y la otitis media.

Medidas higiénicas tan sencillas como taparse la boca, usar pañuelos desechables y lavarse con frecuencia las manos pueden evitar algún contagio ya que el virus se transmite por el aire, al toser o estornudar.