Las abundantes lluvias de los últimos días han servido para nivelar los pantanos de la provincia y reestablecer una situación de normalidad. El consejero de Medio Ambiente, José Fiscal, compareció ayer miércoles para dar fe de los últimos datos recabados y para actualizar las últimas valoraciones: «Ahora no se contemplan medidas drásticas en la Costa del Sol. Ni para el abastecimiento ni para el regadío». Un mensaje, a priori, tranquilizador, y que llega en pleno proceso de elaboración del decreto de sequía. Según Fiscal, el protocolo que saldrá cuando finalice este periodo de lluvias no tiene nada que ver con el barruntado hace apenas una semana, antes de la llegada de las precipitaciones.

Con la mirada puesta en la provincia, Fiscal habla así de una situación de normalidad, a pesar de que los pantanos muestren unos niveles inferiores a los del año pasado. A falta de registrar nuevas lluvias, el acumulado de 70 hectómetros cúbicos de agua en los embalses de la provincia sirve para garantizar el abastecimiento en la provincia durante los próximos siete meses. El cálculo empleado por los expertos es el siguiente: la capital consume a lo largo de un año 70 hectómetros cúbicos y el resto de la provincia unos 120.

Las últimas precipitaciones permitirán que las medidas a incluir en el mencionado decreto de sequía sean menos restrictivas en las zonas de la Costa del Sol y de la Axarquía. El punto rojo en la provincia lo representa el pantano de La Viñuela, que mantiene la escasez severa de agua.

Además de Fiscal, también compareció el delegado del Gobierno de la Junta en Málaga, José Luis Ruiz Espejo, para un informe pormenorizado. Ruiz Espejo ratificó los 70 hectómetros cúbicos en la provincia de Málaga. En una línea similar a la de Fiscal, expresó que las últimas precipitaciones «han dejado un panorama más optimista que el que teníamos antes de las lluvias de esta semana». A pesar de ello, matizó ante un panorama que dista de despejarse por completo: «No hay que lanzar las campanas al vuelo».

En este sentido, sostuvo que el agua «es un bien finito» y abogó por «tener prudencia», además de hacer un llamamiento a un consumo de agua moderado. En estos momentos, los embalses y pantanos de la provincia de Málaga se sitúan en una media cercana al 45 por ciento de capacidad, destacando el embalse de la Concepción (79,42%).

En orden, vienen los del Guadalhorce (53,91%), Limonero (51,97%), Casasola (51,29%), Conde de Guadalhorce (48,91%), Guadalteba (34,63%), y La Viñuela, que es el de más capacidad, (30,38%).

Ruiz Espejo también recalcó que cuando finalice el periodo de lluvias, que según las predicciones aún no ha concluido, los técnicos de la Consejería de Medio Ambiente analizarán la situación en cuanto a almacenamiento, capacidad y garantía de abastecimiento y se estudiarán las medidas que se adoptarán para los próximos meses.