El puerto de Málaga congregó ayer a más de un centenar de profesionales y expertos que analizaron en el seminario «Smart Ports. Gestión energética en los puertos andaluces», organizado por la Fundación Gas Natural Fenosa, las soluciones sostenibles que deberán aportar los puertos inteligentes para contribuir a la mejora de la calidad del aire (entre ellas la autosuficiencia energética de estos recintos gracias al uso del gas natural y las energías renovables). A la jornada asistieron el consejero de Empleo, Empresa y Comercio de la Junta de Andalucía, Javier Carnero, el presidente de la Autoridad Portuaria de Málaga, Paulino Plata, y el director general de la Fundación Gas Natural Fenosa, Martí Solà.

Carnero destacó que la Junta trabaja ya en impulsar la transformación energética de los puertos andaluces para mejorar tanto su competitividad como la sostenibilidad ambiental del transporte marítimo. Así, dijo que a través de la Agencia Andaluza de la Energía «tratamos de aplicar nuestros instrumentos de apoyo al ámbito portuario y estamos proponiendo a la Comisión Europea la necesidad de apoyar las inversiones en los puertos». Estas inversiones se centrarían en el despliegue de redes inteligentes, en la generación de energía mediante fuentes renovables (incluyendo el almacenamiento eléctrico), en los sistemas alternativos para el suministro de energía a los buques y en la gestión energética para la eficiencia. El consejero destacó la importancia de los puertos en la economía andaluza: representan el 5% del PIB, aglutinan más de 90.000 empleos y son la puerta de salida del 46% de las exportaciones andaluzas.

«Tenemos que estar a la vanguardia para ir buscando que ese elemento contaminador vaya desapareciendo en la medida de nuestras posibilidades y que los puertos se vayan viendo como una actividad mucho más sostenible, industrial de primer orden como es, con la importancia y significación que tiene en todo su conjunto», explicó.

Por su parte, Plata dijo que «la transformación del puerto de Málaga en un puerto inteligente» supone uno de los retos de futuro «imprescindible para hacer más sostenible y eficaz nuestra actividad». Plata, que asume que los barcos son «grandes contaminantes», destacó que la proximidad del recinto portuario al entorno urbano provoca que sea aún más importante el seguir avanzando en esta sostenibilidad, algo que contribuirá a la mejora de la calidad del aire. «Todos los puertos estamos igual, en la media. Estamos obligados a implementar las últimas tecnologías, los últimos avances para evitar contaminar el medio ambiente, y, por tanto, perjudicar a la ciudad», dijo.

Precisamente en esa misma línea, el director general de la Fundación Gas Natural Fenosa, Martí Solà, destacó el compromiso medioambiental de la compañía con la promoción de los smart ports. «El desarrollo eficiente de los nodos portuarios será el principal camino para conseguir un desarrollo sostenible que asegure un futuro mejor. Desde la Fundación trabajamos para sensibilizar a la sociedad y a las administraciones de la importancia de conocer los entornos energéticos para aprovechar todas las posibilidades de desarrollo de las ciudades», apuntó.

Los expertos que participaron en el seminario coincidieron en la necesidad de implantar soluciones que, desde el ámbito de la industria portuaria, que contribuyan a mejorar la calidad del aire. Nueve de cada diez personas en el planeta respira aire con altos niveles de polución, que provocan la muerte de 7 millones de personas al año, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).

En este contexto, comentaron que pese a que el transporte marítimo es el medio más eficiente, también es el responsable del 15% de las emisiones globales de NOx, hasta el 8% de las de SOx y del 2,5% de las de Gases de Efecto Invernadero (GEI). Así, la Organización Marítima Internacional (IMO) ha establecido que, a partir del 1 de enero de 2020, no se podrán quemar combustibles con contenido de azufre superior al 0,5%, si no se dispone de unos filtros de limpieza de gases o scrubbers.

En este escenario, el gas natural licuado (GNL) es una de las alternativas más eficientes para sustituir a los combustibles que estarán prohibidos dentro de dos años, según explicó el responsable de Desarrollo de Bunkering de GNL en España y Portugal de Gas Natural Fenosa, José María Ruiz Antón. «El GNL no tiene emisiones de azufre, reduce un 90% las emisiones de NOx, y un 99% las emisiones de partículas, siendo uno de los combustibles más limpio disponible en la actualidad», apuntó. La compañía es uno de los operadores principales de GNL en la cuenca atlántica y es líder en la península ibérica, donde está desarrollando soluciones logísticas para que el combustible esté disponible en todos los puertos de la península.

En la actualidad ya operan 125 barcos propulsados por GNL y hay encargados otros 150. En lo que respecta al transporte de mercancías de forma más sostenible, actualmente se han encargado grandes portacontenedores propulsados por GNL para cumplir con la nueva regulación.

Las grandes navieras también se están apuntando a esta tecnología: Carnival tiene encargados nueve cruceros de este tipo, MSC otros cuatro y Royal Caribbean dos.