Un mes para aprobar o para suspender. Poco más de 30 días -la Liga acabará el fin de semana del 21 de mayo- para ganarse un puesto en la plantilla de la próxima temporada o para hacer el petate en busca de fortuna lejos de Martiricos. Ése es el mensaje que Míchel ha enviado a sus jugadores en los últimos días y es una forma de dar un toque de atención, de expresar que lo que está viendo ni le gusta ni le sirve para el próximo curso, donde el madrileño tendrá mando en plaza en la planificación.

Porque es inevitable mirar a la próxima temporada, una vez que la salvación virtual está sellada -quedan 18 puntos por disputarse y el Málaga mantiene la renta de 11 puntos más el average sobre el antepenúltimo- y con los deberes clasificatorios casi hechos. El Málaga de Míchel aprovechará este último mes de competición para intentar mejorar en la tabla, para lavar su imagen con respecto a la afición tras un campeonato decepcionante en muchos momentos y también para configurar el futuro.

Míchel ya se ha sentado con Francesc Arnau a planificar el próximo curso. El técnico madrileño no ha escondido en sus comparecencias públicas que su ilusión es hacer un equipo competitivo el próximo año. Y las primeras decisiones pueden influir a muchos jugadores del actual plantel.

El técnico está en un banco de pruebas en estos momentos. En realidad lo lleva haciendo desde que aterrizó en Málaga, donde cogió a un equipo moralmente hundido a siete puntos de la salvación, con un calendario complejo, que llegó a estar a cinco de la quema, pero que ahora está a once. El madrileño ha probado diversos sistemas de juego, incluso ha incidido en la defensa de cinco buscando la fortaleza en la zaga, con extremos, con dos delanteros... Posiblemente Míchel ha llevado al césped todas las opciones posibles que la plantilla podía ofrecer en busca de la tecla adecuada y también como test de pruebas de lo que tiene a su disposición.

El técnico, en los seis partidos que restan, continuará haciendo probaturas, aunque sin descuidar el resultado. Y es que Míchel es consciente de que la afición también adolece de momentos de felicidad este curso, y que su proyecto para la próxima temporada también comienza a escribirse en lo que resta de ésta.

24 jugadores

Aunque resten seis jornadas, un mes de competición, hay varios jugadores que están en el punto de mira del míster, otros que incluso ya tienen definido su futuro y otros que aguardan más protagonismo de aquí al final.

Míchel ha contado con 24 jugadores hasta la fecha, todos menos Boyko, y todos han podido mostrar su valía. Cedidos, jugadores que acaban contrato, algunos que tienen contrato en vigor pero con poco peso en el equipo... Todos están alerta. Nada es definitivo y en un mes está en juego su futuro.