El nerviosismo aún no ha cundido en las oficinas del Málaga CF, aunque sí es cierto que el club esperaba tener, a día de hoy, ya cerradas y selladas más operaciones, tanto de entrada como de salida, de las que tiene. Y es que, la entidad de Martiricos, a 11 días de que dé comienzo la pretemporada con las pertinentes pruebas médicas, aún no ha hecho oficial ningún fichaje ni ha confirmado ninguna baja más allá de los jugadores que terminan contrato el 30 de junio.

En todo caso, el Málaga tiene firmado desde hace tiempo el fichaje de Adrián González, ya confirmado de manera oficiosa por Francesc Arnau nada más terminar la Liga, pero que aún no se ha hecho oficial por parte del club. No se hará esperar el anuncio del fichaje del hijo de Míchel. Aunque la presentación del futbolista se puede demorar hasta que finalice sus vacaciones y aterrice en Málaga para la pretemporada, aunque en un principio el club pretendía que fuera presentado la semana que viene en el Campo del Atlético Juval, uno de los equipos con el que el Málaga tiene suscrito acuerdos de colaboración y al que quiere premiar con esta iniciativa.

Además, el club tiene encaminadas otras operaciones, pero que por unas cosas u otras aún no han cristalizado definitivamente. Es el caso, por ejemplo, del fichaje de Roberto Jiménez. El Málaga ha ido dando pasos cortos pero firmes para hacerse con los servicios del guardameta madrileño, cerró un acuerdo con él semanas atrás y las negociaciones con el Espanyol, club al que pertenece el meta, van bien encaminadas y no debería haber complicaciones para anunciar su fichaje en los próximos días.

El resto de operaciones que mantiene abiertas el Málaga, tanto de entradas como salidas, se cuecen a fuego lento, aunque el club espera que a partir de la semana que viene pueda ir esclareciendo el futuro más inmediato de la plantilla que se va a encontrar Míchel a partir del 5 de julio.

Y es que, el entrenador malaguista dejó claras sus pretensiones de contar con una plantilla corta, con mucha calidad y en la que tenga cabida los jugadores del filial. Pero para ello, el club debe aligerar en sus operaciones, contratar futbolistas y dar salida a los futbolistas con los que no cuenta el entrenador madrileño.

Lo cierto es que el asunto Sandro ha alterado la hoja de ruta del Málaga. Los continuos vaivenes del delantero canario y su representante han alterado el plan inicial del conjunto blanquiazul. En un principio, el club contaba con la continuidad del ariete, al que le presentó una jugosa oferta de renovación para que fuera la cabeza visible del proyecto. Pero Sandro decidió seguir deshojando la margarita, llegar a un acuerdo con el Atlético de Madrid, pasar del los colchoneros tras conocer la sanción ratificada por el TAS y volver a retomar la opción del Everton. En el club ya dan por hecho que su marcha al club inglés es firme, pero hasta no conocer el destino final del canario ha estado, en cierta manera, atado de pies y manos, ya que la primera opción blanquiazul era retener a Sandro a toda costa, ya fuere en propiedad o en forma de cesión.

Ahora, conociendo la intención de Sandro de firmar por el Everton previo pago de los seis millones de euros de su cláusula, el club se ha lanzado al mercado a por un sustituto. Borja Bastón, Joselu y Álex Alegría son varios de los artilleros que maneja el Málaga para sustituir al canario, pero aún no hay nada cerrado pese a la buena predisposición y el interés que han puesto estos futbolistas en recalar en el Málaga.

Además, hay otros puestos a reforzar y otros en los que hay overbooking que necesitan aligerar efectivos lo antes posible.