El pasado 11 de octubre, y en la ciudad de Sevilla, los sindicatos UGT y CCOO junto con la organización empresarial más representativa del sector del comercio en Andalucía, CECA, y las organizaciones de consumidores Al-andalus, Federación Andaluza de Consumidores y Amas de Casa, Facua Andalucía, Consumidores en Acción y Unión de Consumidores de Andalucía, UCA-UCE, ante la proximidad de los procesos electorales generales firmamos un manifiesto pionero y sin precedentes en España que aunaba la voluntad de las partes firmantes por el mantenimiento del actual marco normativo que regula los horarios comerciales en Andalucía. Sin duda, una de las piezas clave del modelo de comercio de nuestra comunidad, por el que abogamos todos los allí presentes. Es éste un modelo de comercio urbano, socialmente rentable (la actividad del pequeño comercio tiene un papel primordial dentro de la vertebración social y la revitalización de los municipios) y sostenible, que forma parte de nuestra cultura mediterránea, que garantiza el equilibrio entre los distintos formatos comerciales y que hace posible la compatibilización de la vida social, laboral y personal.

Cuatro meses después de esta firma y a las puertas de las elecciones autonómicas andaluzas, se han vuelto a unir nuestras voluntades, contando en esta ocasión con el apoyo de tres de las principales fuerzas políticas de Andalucía: PSOE, IU y PA, para reafirmar nuestros argumentos en defensa del actual modelo de comercio andaluz y del actual marco legal de horarios comerciales. Desgraciadamente, el PP ha dado la callada por respuesta. El argumento que ha dado a los medios de comunicación ha sido decir que no fue invitado al acto. O mienten o no se enteraron. Esto último no es creíble ya que al acto celebrado el 2 de marzo en Málaga se invitaron a todos los partidos y organizaciones de ámbito andaluz, incluido el PP de Andalucía, hecho que se puede constatar.

Lo que desde CCOO entendemos con la no presencia en un acto a favor del mantenimiento del modelo comercial andaluz, promovido por todos los agentes sociales y económicos y las asociaciones de consumidores, es que el PP está a favor de la liberación de los horarios comerciales, como ya ha ocurrido en la Comunidad de Madrid con el Gobierno Autonómico de Esperanza Aguirre. Si no es así que salga públicamente y que diga que está a favor del mantenimiento de los horarios comerciales en Andalucía. Seguramente el Gobierno del presidente Rajoy estará esperando a que pasen las elecciones autonómicas de Andalucía para llevar a cabo la liberación de los horarios comerciales en el conjunto del Estado. Esto repercutiría a las 120.000 empresas y las 450.000 personas que trabajan en el sector, es decir, el 16% del empleo andaluz, cifra que supera ampliamente el 13,8% de la media nacional.

Una mayor apertura de domingos y festivos acarrearía consecuencias nefastas para este sector tales como el cierre de negocios y la pérdida de empleo, así como los perjuicios que supone para la conciliación del trabajo con la vida familiar de las personas trabajadoras. Además, una mayor flexibilización de horarios comerciales rompería con el actual modelo comercial andaluz, basado en la apuesta por el comercio-ciudad y pondría, a su vez, en peligro el modelo mediterráneo de sociedad en el que el ocio y las relaciones familiares y sociales son pilares básicos.

La desaparición del tejido comercial de proximidad supondría, además, un coste social inasumible para aquellas personas con mayor dificultad de movilidad (mayores, familias numerosas, etc.); aumentaría la insostenibilidad medioambiental al promover un mayor uso del vehículo privado, y aceleraría la desertización de los centros y barrios de nuestros pueblos y ciudades, con el consiguiente aumento del riesgo de inseguridad.

Nadie habla ni pide ampliar los horarios comerciales en Andalucía salvo las grandes superficies comerciales, que lo hacen para ganar cuota de mercado a través de la modificación de los horarios, de la competencia desleal y precarizando el empleo con la nueva reforma laboral llevada a cabo por el Gobierno Rajoy.

CCOO considera que los grandes operadores de las grandes distribuidoras comerciales, con la ampliación de los horarios comerciales y el trasvase del consumo del formato de pequeño y mediano comercio de proximidad hacia los grandes distribuidores comerciales para ganar cuota de mercado, destruirían y precarizarían el empleo en un sector ya de por sí altamente precario, con altas tasas de jornadas parciales y la jornada irregular en las grandes superficies que los empresarios van a alargar incluso más con la citada reforma laboral. En definitiva, jornada a la carta para no contratar más plantillas.

Por todo ello vamos a seguir defendiendo el comercio, también por su calado social, ya que crea ciudad y genera actividad en los cascos urbanos. El modelo de comercio mediterráneo que tenemos en Andalucía mantiene los centros urbanos y los pueblos vivos, además de ser sostenible y generador de empleo de calidad que viene dando buenos resultados desde hace quince años, tal y como demuestra el crecimiento del sector. Buena parte de este crecimiento es fruto del marco normativo que consensuamos entre todos, donde se contemplaban los intereses de todos los agentes implicados. Por eso, CCOO defiende que si se demuestra que algo funciona bien ¿por qué hay que cambiarlo? En ese sentido consideramos que los consumidores y los turistas que nos visitan tienen bien atendidas sus necesidades con el actual marco de horarios comerciales que rige en Andalucía, tal y como lo demuestra una encuesta del CIS.

[Gonzalo Fuentes es secretario general de Comercio, Hostelería y Turismo de CCOO de Andalucía]