Esta derecha es muy de derechas. Esta derecha no es la que pivotó la transición desde la UCD pactando con la izquierda. Con ellos discutíamos, pero eran unos demócratas. Cuando el golpe de Tejero, que sigue viviendo en Torre del Mar, cerraron filas en defensa de las libertades con nosotros, codo con codo. Esta derecha de ahora es diferente, es sectaria y revanchista. Cuando mandan, «mandan», quieren que se les note.

Yo fui alcalde socialista de Vélez-Málaga entre 1996 y 2007 y antes de mí hubo otros dos alcaldes socialistas. A ninguno se nos ocurrió ser revanchistas. Se retiraron símbolos como la Cruz de los Caídos que había en Torre el Mar junto a la Parroquia, o la lápida con los «caídos por las hordas rojas» en el Palacio de Beniel. No olvido que asesinaron al párroco de la Torre en el 36, ni olvido a los demás asesinados antes de la llegada de los nacionales, ni mucho menos a los asesinados después. Todos perdieron la guerra y sus familiares también. Ni puedo olvidar a los que huyeron por la carretera de Almería por los que hicimos un monumento para recordarlos desde la convivencia. Todos los que sufrieron merecen respeto y consideración.

Encargué una galería de retratos de los alcaldes de Vélez-Málaga. Salvo uno, los demás son obra del genial Paco Hernández, recientemente fallecido. Pude haber propuesto que a partir de 1979 con los ayuntamientos democráticos en adelante. Sin embargo se encargaron de todos los ex-alcaldes vivos por entonces. Porque sin duda fueron personas que trataron de hacer lo mejor por nuestra ciudad aunque no hubiese libertad en su tiempo. No había por qué ser revanchista con ellos, los que habían vestido camisa azul, porque trataron sin duda de hacer lo mejor que pudieron. A algunos tuve la suerte de tratarlos y aseguro sus cualidades humanas. Como Alfonso López con quien me gustaba hablar y siempre me aconsejó bien. Sus últimos años se dedicó entre otras cosas a tocar el piano, algo que yo admiro. O Manuel Reyna, padre de dos buenos amigos míos, y que recuerdo era el alcalde de Vélez-Málaga cuando allá por febrero de 1979, poco antes de las primeras elecciones democráticas a ayuntamientos, me presenté, porque entonces la llegada de un joven médico incluso a Vélez-Málaga era algo excepcional y lo primero era presentarse al alcalde. Por ello, al proponer IU-CA el nombre de Dolores Ibárruri La Pasionaria para una avenida en Vélez-Málaga, siendo yo alcalde, lo apoyé sin dudas. Nada tenía que ver con la Guerra Civil, sino con un hecho para mí trascendental: la democracia llega a España a pesar de las dificultades, por la generosidad de muchas personas. Unos de derechas, ya lo he dicho, y otros de izquierdas entre los que se encuentra lógicamente el PSOE. Pero es fundamental la aportación del Partido Comunista de España (PCE) en esos momentos. Sin el PCE esto no hubiera sido el ejemplo de convivencia que fue. Ni yo, ni nadie, podemos olvidar que Dolores Ibárruri La Pasionaria era la presidenta del PCE en esos años de la transición democrática. Sin ella, sin Santiago Carrillo y sin tantos otros, como el malagueño Tomás García esto habría sido de otra forma. Aunque esta derecha de ahora no lo valore. Y ahora la derecha, a propuesta del PP, la quiere retirar. La misma derecha que se opuso a que el parque Central de Vélez-Málaga llevase el nombre de María Zambrano porque decían «había hartazgo de tanta María Zambrano en Vélez-Málaga».

Dolores Ibárruri hizo mucho por la democracia en la transición y siempre. Si esta derecha revanchista además quiere que hablemos de la Guerra Civil, hablaremos. No se nos olvide que los golpistas atentaron contra la libertad atacando la democracia que significaba la II República. Y Pasionaria estuvo del lado de la libertad. Los comunistas eran gente disciplinada, luchadora, entregada por la República. Lo mejor de la República se representa sin duda en su ejército, los jóvenes soldados y militares como El Campesino, Lister, Modesto, Etelvino Vega, Tagueña, Hidalgo de Cisneros, y tantos otros.

Por esto y por mucho más, es un despropósito que con la que cae en estos momentos, con la crisis económica, con los problemas tan graves que viven tantas personas, la derecha de Vélez-Málaga se dedique a retirar el nombre de Dolores Ibárruri La Pasionaria a una vía urbana. Estos no son los problemas a los que debe hacer frente un ayuntamiento. Pero puedo asegurar que, si lo consiguen, Vélez-Málaga volverá a tener una calle con el nombre de Pasionaria porque hay ideas que sobreviven la mezquindad.